Celebrar el día de San Valentín no tiene por qué suponer un gran gasto económico para que sea una velada especial: hay decenas de planes que pueden hacerse tanto con el mínimo presupuesto como en casa. Puedes preparar una sesión de spa o una cena romántica en casa, puedes ir a ver una exposición o salir a bailar, entre otros muchos planes.

Cena romántica en casa

Si tu presupuesto es bajo, lo mejor que puedes hacer es preparar algo especial en casa, como una cena romántica, ya que el gasto solo será lo que compres en el supermercado para cocinar. Para ello, prepara un menú de primer y segundo plato y postre escribiéndolo en una cartulina simulando la carta de un restaurante.

En cuanto a la comida, para el primer plato o entrante puedes elaborar una ensalada ligera y fresca de tomates cherry con mozzarella y aceitunas negras, una vichyssoise o unos tomates rellenos... y para el segundo o el plato principal tienes infinitas opciones como carne, pescado o pasta. Para el postre puedes optar por un tiramisú, una tarta de manzana o de limón, pero si necesitas inspiración, consulta todas nuestras recetas en este enlace.

Picnic en el parque

Para hacer un picnic en el parque tienes dos opciones: comprar los alimentos ya preparados en el supermercado o cocinarlos tú mismo. Después, piensa en algún lugar íntimo como un parque, el campo o la playa que pueda daros tranquilidad. Es imprescindible que lleves contigo, además de los aperitivos, una manta o una tela para cubrir el suelo y estar cómodos. Además, si preparas una tabla o una caja con todos los productos bien colocados, le dará un toque más detallista al encuentro.

Picnic Pexels

Maratón de cine en casa

Aunque no lo parezca, hacer una maratón de las películas que más te gustan como si estuvieras en el cine es muy fácil. Lo primero e imprescindible es pensar cuáles son los films que quieres ver para tenerlos preparados y ponerlos uno detrás del otro, tanto si es en DVD o Blu-ray como en una plataforma de streaming. Es importante preverlo para no perder demasiado tiempo buscándolas y que se rompa la magia.

Prepara la zona de visionado: puedes hacer un fuerte con los cojines del sofá y poner unas sábanas a los lados y por encima de la televisión para que parezca que estáis en un espacio cerrado. Por otro lado, prepara las palomitas, chucherías, chocolatinas y bebidas que más os gusten. Incluso puedes hacer unas entradas de cine a mano para dárselas a tu pareja y canjearlas por cada sesión.

Exposiciones

Si os gusta el arte a los dos, podrás encontrar una exposición en alguno de los museos de tu ciudad que sea de entrada gratuita y así poder pasar una tarde o una mañana haciendo algo que a tu pareja y a ti os guste. Incluso podéis iros después a tomar un café y pasar un rato charlando a modo de cita para romper la rutina.

Spa en casa

Montar una sesión de relax y de spa en casa es bastante sencillo y si tienes bañera será mucho mejor para poder añadirle un baño de espuma. Si no es así, no te preocupes, puedes disfrutar de ese momento con tu pareja y cuidaros el uno al otro. Aprovecha, en cualquier caso, colocando algunas velas, apagando las luces y poniendo música. También podéis daros un masaje mutuamente, centrándoos en cada parte del cuerpo y que no sea de esos que duran cinco minutos. Además puedes comprar una mascarilla para la cara, que las hay muy económicas, y os dais un extra de mimos.

Planes para San Valentín: mascarilla facial Pexels

Salir a bailar

Salir a bailar no tiene por qué suponer un gasto: algunos bares y discotecas no cobran entrada y puedes entrar a bailar y disfrutar de una noche de juerga sin gastar. Si a ambos os gusta moveros al ritmo de la música es un plan muy recomendado, la diversión está asegurada.

Ir a ver las estrellas

Otro planazo que no tiene más gasto que coger el coche o el autobús para desplazarse es ir a ver las estrellas. Te recomendamos que vayáis a un lugar alejado donde no haya demasiada contaminación lumínica y os tumbéis en una playa o en el campo con una manta y algo de beber. Así, podréis disfrutar de ver las estrellas y descubrir más sobre un cielo que no se ve todos los días.