Se nos fue Guillem Galmés Sala, de 90 años, de los que buena parte de ellos dedicó a la familia y la vinicultura, con gran experiencia en la elaboración del ‘vi de missa’. Le conocí a la par que a su hijo Arnau, en una de las ferias artesanas de IFEBAL, en el Polígono de Llevant, cuando las primeras añadas de sus vinos iniciales salían al mercado. No era persona de muchas palabras, pero cuando dialogabas con él era un placer. Apoyó de forma firme a su hijo, en su proyecto de bodega, en Petra, su tierra, pudiendo ver los resultados positivos que alcanzó. Descanse en paz. 

La rehabilitación del palmesano edificio situado en la esquina de la corta calle Esparteres con la de Concepción, convertido en el hotel Butique, de cinco estrellas, Concepció by Nobis, trae muchos recuerdos, tanto a nivel gastronómico como pelotari. El bar de este nuevo hotel de lujo ocupa la zona en donde se situaban el comedor, la cocina y la famosa barra de la añorada Bodega Santurce, en donde Anxon, reconocido pelotari dirigía el cotarro, mientras que su mujer, su suegra y su cuñada dominaban la cocina. Su hijo, Antonchu, sucedió a su padre en el negocio. La cocina que la familia Rocha practicaba, era casera, con influencia vasca y de otras zonas. A mí, me chiflaba su hígado de ternera con cebolla. Algunos jóvenes pelotaris, de cesta punta, hacían, en ocasiones, de camareros. El Santurce tenía una clientela variada, incluyendo familias, pilotos y azafatas, periodistas y gente conocida. Varias de las fotos de pelotaris jugando las realizó el desaparecido Iñigo. Tiempo más tarde, en la esquina citada se abrió el O Barco, dirigido por un gallego, y en donde se comía bien, cuando ya el Santurce quemaba sus últimos cartuchos. 

El escamerlá, marisco preferido por los ya desaparecidos ‘señors de Barcelona’, denominadas cigalas, tiene alta demanda durante este verano, especialmente con huevos fritos y patatas de sartén. 

Empezó la vendimia 2021 en la isla, con ciertas mermas en la uva y problemas sanitarios, debido a las lluvias, el granizo y el exceso de calor. Si bien se espera una añada de calidad. 

Como este número de MANJARIA el protagonista es el atún, confieso que a mí me gusta mucho el atún tojo. Mi receta es un buen filete de atún frito con aceite de oliva, con rodajas de cebolla y tomate, y flambearlo con brandy. Acompañado por un blanco seco, con algo de barrica.