Aplaudo la decisión de la Pajarita, cuyos propietarios tocan con los pies en el suelo, al evaluar con seriedad los pros y los contras respecto a cómo afrontar las dificultades actuales. Creo que ha sido muy responsable que Pep Mulet haya dejado sus músicas, para el seguir el negocio creado por antepasados suyos en 1872. Y con la anuencia de su padre, Javier Mulet, que deseaba pasar a la reserva. Fichar a Pau Barceló para la cocina de La Pajarita, en donde ya se preparan menús diarios, puede ser muy positivo.

Nos dejó Juan María Torres, vicepresidente, consejero y accionista de Familia Torres, y representante institucional de la bodega, a la vez que gran embajador de sus vinos y brandies. Fue un honor tratarlo en sus estancias en Palma, en especial cuando era director de Torres Import. Descanse en paz.

Agustín Santolaya, director general de Aubocasa y Tiffany Blackman, su delegada en Mallorca, estuvieron con amigos y clientes gracias a la virtualidad, durante dos días mostrando como se hace una extracción de aceite de oliva virgen extra de la cosecha 2020-2021. Un éxito.

Se inició el ciclo de conferencias dedicadas al chocolate, que desde el 26 de noviembre tienen lugar en el Museo de Mallorca, incluyendo talleres gastronómicos y que finalizarán el 12 de este mes. Participan M. de los Angeles Pérez Samper, Catalina Torres, el Dr. José Tur y Tres Serveis Culturals. Recordemos que Maria G. Salvá Picó ya es ‘de facto’ directora de dicho museo. Que siga en esa línea cultural, en donde la gastronomía como las maneras de alimentarse y de beber en épocas pasadas son protagonistas.

Ya se encuentran funcionando los puestos de ventas de belenes en la plaza Mayor de Palma. Hay para todos los gustos y bolsillos. Siento debilidad por las figuras que representas oficios relacionados con la gastronomía, como pescadores, pastores, panaderos. La verdad es que parte del protagonismo se lo llevan las figuras que representan payesas mallorquinas con sus productos de la tierra y de sus pocilgas, vaquerías o corrales, en especial.

Estas navidades como la llegada del Año 2021 van a ser muy diferentes a las de años anteriores, pero no por eso hemos de deprimirnos, especialmente los que no podrán reunirse con sus seres más queridos. Como muchos, no podremos abrazar a mi hijo, pues este año no viajaremos a China en donde reside, desde casi diez años. Nos conformaremos, si no salen impedimentos, deseándonos mutuamente los mejor para el próximo futuro. Menos es nada. Y la cuestión es poder contarlo. Bones festes y millor Any Nou 2021!