Hay lugares sobre los que a uno se le escapa hablar, aunque los conozca de primera mano. ¿Olvido, estrés? Quien sabe. Lo cierto es que la visita de mi amigo Vicent desde Alacant iluminó mi mente para encontrar un restaurante donde cocinen bien, a buen precio y cerca del mar. Las Palmeras es uno de esos locales con salera e historia en el Portitxol. Sus propietarios empezaron no muy lejos de allí con el Barlovento, a principios de los 80, hasta que tuvieron que dejar el local por cambios en la zona, una situación que levantó ampollas no solo en los propietarios, sino también entre los vecinos (como explicaba mi compañera Raquel Galán en este periódico el 22 de julio de 2007).

Volviendo a la comida, Las Palmeras nos esperaba a Vicent y a mi, como es habitual cada sábado a mediodía, con un delicioso plato del día: porcella crujiente con patatas y ensalada, por 9,50 euros (postre incluido). Su oferta no acaba aquí: cada domingo preparan sus populares paellas, gracias a las cuales conocí el local con mis padres, por 7,50 (con postre). Tampoco faltan sus clásicas frituras con calamares, adobo, pescaíto y pimientos de Padrón, pambolis, ensaladas, hamburguesas y, de lunes a viernes, sus económicos platos del día a 6 euros con postre incluido.

Por cierto, a partir del mes de julio, amplían su horario: dejarán de cerrar los martes y también abrirán por la noche.