Los supermercados y grandes centros comerciales ya huelen a Navidad. Son muchas las estanterías y escaparates que ya lucen adornos y productos navideños. Aunque todavía nos parezca pronto para realizar las compras de cara a la Navidad, hay una serie de detalles a tener en cuenta.

En el caso de la preparación de los menús navideños es habitual que los precios de los productos estrella de estas fechas suban en los días clave. A medida que se acerca la Navidad es muy normal que el precio del marisco o del pescado se dispare. Por eso, apúntate el listado que presentamos a continuación y hazte ya con los alimentos necesarios para tu menú navideño y congélalos previamente.

Sopas y caldos

Las sopas suelen ser una opción muy habitual en las casas para ayudarnos a entrar en calor durante las fiestas. Aunque para prepararlas se pueden utilizar ingredientes de todo tipo y no especialmente caros, sí que es cierto que dejándolas hechas días antes te ahorrarás el engorro que supone tener que picar y cocinarlo todo.

El marisco

Los camarones, los centollos, las nécoras o, incluso, el bogavante son las estrellas de muchas casas en Navidad. Por eso, la opción de comprarlos con antelación y congelarlos es una de las más acertadas. Eso sí, para congelar adecuadamente el marisco se recomiendan los siguientes trucos: hay que cocerlo bien, dejarlo enfriar y guardarlo en el congelador en un film transparente o al vacío para que se conserve bien hasta Nochebuena.

Pero si en tu casa sois más de almejas o percebes, deberás resignarte y aceptar el precio del día que los vayas a consumir, ya que este tipo de marisco sufre con el proceso de congelación.

El pescado

Al igual que el marisco, el pescado también se puede congelar y evitar así tener que comprarlo en los días clave de Navidad cuando su precio está por las nubes. De hecho, es muy recomendable hacerlo ya que de este modo se acaba con el anisakis, un parásito que suelen contener estos alimentos y que sobrevive a las altas temperaturas. Procura comprar el pescado lo más fresco posible y prepáralo antes de meterlo al congelador cortándolo y limpiándolo bien.

La carne

Cualquier tipo de carne puede congelarse y aguantar las bajas temperaturas más tiempo que cualquier otro producto. Lo que sí que no es aconsejable congelar son los fiambres y embutidos.

Para guardarlos bien los filetes, colócalos en bandejas para mantenerlos lisos. Si por el contrario compras piezas de carne grandes que no entran en el congelador, tendrás que partirlas en trozos de una ración. La presentación no será la misma, pero te ahorrarás el dinero que supone comprar la carne días antes de estas fiestas.

Fruta y verdura

En la época de excesos navideños no está de más tener a mano un poco de fruta y verdura a la que recurrir de vez en cuando. Las frutas que vayas a congelar deben estar frescas y en buen estado. Las más recomendables son los frutos rojos, pero también los melocotones, el melón o el limón, ya que no se oxidan.