"Al final, las personas a las que más amamos son a las que, sin querer, hacemos más daño", declara uno de los personajes de la película 'Buscando a Eimish', un reencuentro con el pasado y el destino en el que su directora, Ana Rodríguez Rosell, traza un viaje hacia el interior de las emociones.

Óscar Jaenada y Manuela Vallés protagonizan este filme, el primer largometraje de Rodríguez Rosell, que ha sido rodado en Madrid, Berlín y Verona, y cuyo reparto se completa con Emma Suárez, Jan Cornet y Birol Ünel, entre otros.

Ambos protagonistas se meten en la piel de Lucas y Eimish, una pareja que se encuentra en momentos vitales diferentes. Ella quiere ser madre y formar una familia, pero él quiere mantener la libertad que su relación les ofrece. Este abismo provoca la huída de ella y Lucas se ve obligado a seguir su pista a través de su pasado.

El viaje que Lucas emprende hacia la mujer que ama le llevará a conocer personas y situaciones que desconocía y, casi sin quererlo, se introduce en el alma de Eimish.

La imperfección y la confusión centran este relato en el que, como en la vida, "responder a las expectativas es difícil, por lo tanto, también lo es no herir", según ha afirmado este martes la directora en la presentación.

Por un lado, Lucas tiene una "disyuntiva generacional", explica Jaenada. Su familia ha recibido una educación muy tradicional y él huye de aquello que "debe hacer". "Es un chico contenido, con miedo", por lo que en ocasiones el actor ha tenido que "cerrar la boca" y evitar improvisar.

Eimish es una persona "feliz y alegre" que disfruta de su vida, tal y como se muestra en las imágenes del pasado. El presente que aquí se muestra, en cambio, refleja a una mujer "con dudas, triste y que se encuentra en un momento reflexivo", según ha señalado Vallés.

Berlín, "cosmopolita y urbana"

Berlín es el escenario de la mayor parte de esta película y la elección se produjo porque, en palabras de Rodríguez Rosell, "es la ciudad más cosmopolita y urbana" que conoce. Su "look indie" le pareció un buen motivo para situar a los personajes del filme en "contextos muy diferentes".

La madre de Eimish, Valeria (interpretada por Emma Suárez) vive en un lugar opuesto a la ciudad alemana: Borguetto, una pequeña población situada en el norte de Italia. "Ella irradia luz, pero por dentro es un ser oscuro, triste y vacío", ha señalado la actriz.

Ella es alguien que cierra las puertas y corta el vínculo de su maternidad. "Alguien que hace algo así va a pagar las consecuencias de por vida. Ser cobarde es una de las cosas más duras que te pueden pasar, te pierdes cosas fundamentales y te pierdes el amor", apunta.

En cuanto al aspecto visual del filme, Rodríguez Rosell ha señalado que está inspirado por varias cintas que, de forma consciente o no, han influido en el resultado. Entre ellas, cita las películas del director Wong Kar-Wai, por "sus interiores"; 'Once', por la forma de transmitir sus sentimientos: el "look" nórdico de 'El regreso'.