El actor Cuba Gooding Jr se entregó este jueves a la Policía de Nueva York después de ser acusado de toquetear a una mujer durante una fiesta en una azotea de Manhattan el pasado domingo.

Según han informado medios locales, una asistente al bar donde se desarrollaba la fiesta acusó al intérprete de haberla manoseado mientras estaba bebido, acusaciones que pillaron a Gooding en Los Ángeles (California) y que motivaron su vuelta a la ciudad.

Gooding Jr anunció ayer su intención de entregarse a la Policía neoyorquina después de desmentir dichas acusaciones, aunque durante el día de hoy su abogado había especulado con la idea de que el actor no se presentaría en comisaría. La razón es la existencia de un supuesto vídeo en el que se ve que la conducta del actor no fue inapropiada. "Un estudio extenso del vídeo disponible que se tomó aquella noche demuestra que no hubo ninguna conducta inapropiada por parte de Cuba Gooding Jr y que eso lo exonera completamente de cualquier conducta criminal", afirmó el abogado, Mark Heller.

Sin embargo, Gooding será formalmente arrestado por tocamientos forzosos y la fiscalía de Manhattan decidirá si presenta cargos, algo que se espera conocer hoy.

Relato de los hechos

Gooding Jr, hijo del músico Cuba Gooding, supuestamente agarró del pecho a una joven de 30 años asistente a la fiesta, después de que esta le entregara un vaso de agua para ayudarle a rebajar su grado de ebriedad tras la noche de celebración La mujer alegó que Gooding estaba "muy borracho" y que, después de manosearla, empezaron una discusión que tuvo que ser separada por los agentes de seguridad.

La víctima presentó la denuncia ante la Policía la madrugada del lunes, poco después de cometerse el supuesto caso de acoso, pero Gooding ya se encontraba de camino a su residencia de California, desde donde respondió cuando se supo la noticia.

Los problemas se le acumulan al actor, de 51 años de edad, tras saberse que una segunda mujer al parecer presentó una denuncia por tocamientos inapropiados, aunque en este caso se produjeron hace más de una década.

Esta segunda víctima no se atrevió a notificarlo a las autoridades hasta que se enteró del incidente de este pasado domingo. Este último caso, con todo, ya se encuentra prescrito, ya que las víctimas pueden denunciar hasta un máximo de dos años después del suceso.