Qué gran programa de cine es Historia de nuestro cine, que cada día, desde mayo, emite La2. Cada día, una película. De lunes a viernes. Justo a las 10 de la noche, después de una breve presentación de Elena S. Sánchez, que conversa con diferentes críticos, empieza la función.

Los lunes están dedicados a la década de los 30 y 40, el martes a la de los 50 y 60, y así. Asomarnos a este pozo es un gozo. Claro que hay pelis que te interesan menos, pero todas acaban explicando aspectos de este país, ya sea desde lo bizarro a lo exquisito, desde el drama a la comedia.

El miércoles emitieron una película rara, inquietante, una especie de relectura de Los pájaros, la clásica de Hitchcock, pero en vez de con aves que atacan a los humanos, con niños asesinos, ¿Quién puede matar a un niño? La firma Narciso Ibáñez Serrador.

El jueves pasaron Tras el cristal, la otra cara de la moneda. Cuenta la historia del doctor Klaus, Günter Meisner, que durante la II Guerra Mundial torturó y abusó de miles de críos en los campos de concentración nazis. Acabó conectado a un respirador, un sarcófago de cristal del que depende las 24 horas. Su mujer, una Marisa Paredes fría, adorable y arrebatadora, lo cuida... Hasta que aparece un joven que inicia con el nazi una relación de deseo y venganza. Es una obra maestra de Agustí Villaronga.

Cuento estos detalles porque estos ejemplos de cine no tan conocido, pero de altura, conforman, junto a cintas más populares -la última, Tesis -, el corpus de esta Historia de nuestro cine. Insisto. Muy recomendable. Si no tienen mejor plan, en casa lo encuentran a golpe de mando. Ya saben, La 2, siempre La 2.