Escribir La Nata que leerán hoy es un reto dificilísimo. Allá voy y que sea lo que Dios quiera porque controlar los sentimientos, en celebraciones como las que les voy a contar, se hace complicado. En fin, no sé porque me meto en estos berenjenales, pero sé que la Nata es de ustedes. Para los que se han paseado por las fiestas más elegantes, divertidas o mundanas de esta isla, acompañándome en buena parte de mi vida, incluso en los momentos más complicados, como si fuera amigos íntimos. Para mi es un honor poder compartir uno de los días más felices de nuestra vida. Día y noche en la que los protagonistas han sido habituales y espero sigan siendolo de esta crónica social tan afortunada. El conde Dominik Schenk von Stauffenberg, al que muchos de ustedes conocen y quieren recibió el pasado domingo una de las sorpresas más bonitas de su vida con motivo de su cincuenta cumpleaños que celebraba al día siguiente, el 28 de abril. Un cambio de década y una celebración de la vida que merecía una gran fiesta. Toda esta historia comenzó hace mucho, en el año 2000, que es cuando Dominik fijó su residencia en Palma de manera definitiva. Alemán de pura cepa se sorprendía cuando veía, abandonado y triste un viejo caserón en una de las calles más bellas del mundo, Es Born. Ca´n Alomar, cerrado y tapiado, parecía un lúgubre símbolo de lo que en tiempos fue grandeza. Como una metáfora demasiado evidente. Yo, en esa época ya era como ahora y me temo que voy a peor. Imaginaba una súper fiesta en sus terrazas, volcadas al Paseo, con vistas a La Almudaina y a La Seu. Una gran fiesta que en algún momento imaginamos, y deseamos juntos, aunque pareciera un imposible. También como una metáfora. Pero no. De repente, como por arte de magia, Ca´n Alomar comenzó a cobrar vida, y lo que era una ruina se ha ido convirtiendo poco a poco en el espacio más exclusivo de la ciudad, en uno de los rincones del lujo más elegantes del mediterráneo. Los arquitectos Luis y Jaime García Ruiz han hecho un gran trabajo dando utilidad a una construcción obsoleta, hoy convertida en gran espacio comercial donde conviven una tienda maravillosa y buque insignia de La Relojería Alemana, y de Pablo Fuster y familia, Louis Vuitton que nos demostró que era el lujo de verdad ya en su fiesta de inauguración en la casa de Santanyí de Fabrizzio y Carla Plessi, en una noche mágica que nunca olvidaremos, las tiendas del imperio Inditex, con un interiorismo de altísima calidad y un hotel, de gran lujo, que por casualidad iba a inaugurarse el primero de Mayo, ya con reservas cerradas, que pertenece a unos amigos queridísimos, Miguel Conde y Cristina Martí y la presencia siempre sabia de la gran Cecilia Conde, su madre. Los Conde han abierto en pocos años Ca´n Cera y El Hotel Calatrava, dos símbolos de la calidad, suprema y se aventuraban ahora con un proyecto de mayor envergadura y un concepto distinto, más anglosajón. Las hadas se pusieron de acuerdo porque Miguel y Cristina, al conocer la historia romántica que acabo de contarles se comprometieron de inmediato a tener el hotel, o al menos sus salas de recepción y las terrazas por supuesto, listas para que se pudiera celebrar la fiesta de cumpleaños soñada. Cumplieron, trabajando a destajo, luchando con los miles de inconvenientes de última hora que supone una obra de estas características y el 27, a las nueve de la noche, Boutique Hotel Ca´n Alomar abría al fin sus puertas, para la fiesta perfecta. Lo fue. Gracias Cristina y Miguel, tanta juventud y tanta sabiduría son una inspiración. Invitaban las hermanas de Dominik, S.A.S la princesa Alexandra von Hohenzollern y la baronesa Clarissa von Elverfeltd-Ulm, y un servidor, a una fiesta sorpresa. El anuncio llegó mediante una invitación preciosa, muy elegante, diseñada por Estudio Buque, que dirige Javier Escobar, con su genio inimitable, su magia y un saber hacer único, potente, que le hizo involucrarse en la escenografía de lo que debía ser una noche única como si se tratara de la de su propio hermano. La invitación, impresa en Gráficas Planisi y escrita con arte superior de gran ilustrador por Jaume Vilardell convocaba a las 50 personas que Dominik más aprecia, por mil motivos que no vienen al caso podríamos haber sido 500 y daba las claves de cómo sería la velada. Una cena, de smoking y con las señoras vestidas de largo, y lo más importante, que debía ser una sorpresa total. Lo fue. Lo que pensó sería una cena de etiqueta en familia en un lugar alejado del centro se convirtió en un cuento de hadas maravilloso. Frente a la entrada de San Felio del nuevo hotel, elegantísima, limpia, y pura, donde destaca una lámpara soberbia , la recepción, donde fueron congregándose los invitados y con ellos muchos curiosos sorprendidos con el espectáculo de elegancia que estaban viviendo. Una auténtica alfombra roja. ¡Qué elegantes todos y todas!. Seguramente no eran conscientes que estaban viviendo un momento histórico para la ciudad, la primera fiesta que se daba en esa casa en muchos años, y en honor de una de las personas que más lo merecen. Un libro de firmas de nuestra familia guarda los deseos de todos los que iban accediendo a la primera planta del hotel, donde están los salones, el hall de entrada, acogedor y elegante en extremo dando paso a una sala bellísima, austera, la sala publica de Palma. No hay otra igual. Ya lo comprobarán. A la llamada de Escobar nos dirigimos andando al hotel, hicimos que Dominik entrara, accediendo en cortejo Alexandra Hohenzollern acompañada por Jorge y Lissi von Oppen y tras ellos Clarissa Elverfeltd de mi brazo. Dominik fue recibido con gritos de bienvenida y aplausos de cariño sinceros y muchas felicitaciones. Fue un momentazo único. Haber visto su cara es para nosotros un regalo impagable. Se lo debemos a muchos. Los miembros del equipo de Buque, Mónica Martorell, Carolina Melgar, Sergi Pallares, Laura Perelló, Brenda Fiorito, Anna Noguer estuvieron pendientes de todo y de todos, midiendo tiempos en perfecta coordinación con el equipo de la casa comandado por Miguel Conde y la maravillosa Susana Tejada. Crearon para la velada, en las cocinas del hotel, que se inauguraban, un menú que entusiasmó por su frescura. Gazpacho de dos tomates, Ajoblanco con tartar de vieira, tartar se salmón, ceviche de pescados y mariscos con leche de tigre, langostino crujiente con salsa criolla, terrina de foie al PX y un steak tartar crujiente de yuca. Se dispuso en una de las terrazas una mesa de quesos y panes variados, gran idea, y de postre tarta crujiente de limones de Sóller, Chocolate y albaricoque. Ver la imagen de esos salones y esas terrazas, perfectamente iluminados y decorados, aromatizados con arte y para la ocasión con unos bosques de orquídeas maravillosos de Edden Garden de Fede Álvarez y Carolina Mora, hicieron un trabajo fantástico, perfecto para esa noche y para este restaurante que ya está abierto para que todos los que lo deseen disfruten de la mejor comida de inspiración japonesa y peruana en un lugar imprescindible y de belleza indescriptible. Ya está siendo un éxito. La fiesta regada con los vinos Blanco LLum 2003 de Macià Batle, el tinto Caliza 2009 del Marqués de Griñón, champagne Marteaux Brut Reserve, cervezas de Brabante fue conquistando la noche a medida que las terrazas se embellecían más si cabe con el silencio de la madrugada solo roto por la música que creó para la ocasión el gran Pepe Link, una selección perfecta, muy pensada. La inspiración para la ambientación musical del cumpleaños de Dominik fue una mezcla de estilos representativos de la forma de sentir y vivir la vida de Dominik, inspirado en sus viajes alrededor de las principales capitales del mundo, París, Londres, Roma o New York. La música seleccionada fue fluyendo según iba avanzando la velada y se sucedían uno tras otro los temas más contemporáneos con clásicos del swing o el jazz para inmortalizar una agradable noche de primavera. Y todo con las mujeres más elegantes de Palma maravillosamente vestidas para la ocasión. Es imposible nombrar a todas, porque todas estaban espléndidas. Las hermanas del celebrante estaban elegantísimas, la cuñada Ángels Mercer también, vistiendo un Cortana fabuloso color aceite de oliva con cola arrastrando, igual que la marquesa de Argensola, Nana Sarriera, que lucía alta costura con una de las faldas mejor cortadas al bies con godet acabado en cola fabulosa. Su hermana Piluca Sarriera se decantó por un Sibila soberbio, Sherezade Benet maravillosa, Ilona Novackova de Dior y Ferragamo, Jepi Corró con una estola de piel magnifica y falda con vuelo quitaba el sentido, las hermanas Buades, vestidas también por Cortana al igual que Elena García-Ruiz estaban maravillosas, María José Barceló más bella y chic que nunca, Maite Arias sublime, María Rumeu y María Camuñas elegantísimas y muy primaverales, Pepa Juan de lentejuelas luciendo una figura fantástica, Alejandra Salvá guapísima, Marian Bisbal en gasas maravillosas, Àngels Salleras con la espalda de la noche, sublime, Ana Rosa Pidal con el encanto de las grandes damas de siempre. Cristina Martí, que arquitecta tan joven que haya hecho ya tres hoteles no existe en el mundo se decantó también por un Cortana, divino en verde pino, Asunción Garau más guapa que nunca en perla, Cecci Sandberg con joyas de familia y muy guapa en blancos y negros de gran firma, Catalina Nicolau, fantástica, como Neus Cortes, Bárbara Bergman, fabulosa, reinterpretando la noche. María Jose Castellví en azules cielo, alegres como los verdes de Carmen LLiteras o la diadema de Estefanía Pomar. La gran alegría de la velada fue la presencia de Doña Fanny Morell Cotoner, que con sus casi cien años vive la vida y nos da una lección impagable de señorío mallorquín impagable. Me detengo con los invitados porque todos eran importantes, mucho, del alcalde Mateo Isern, en calidad de querido amigo, a cualquiera de la larga lista de nombres de nuestra sociedad y el arte, como Susy Gómez y Juan Antonio Horrach o Pep Pinya e Isabel Izquierdo. He dicho que me para y paro. Sonaron las doce campanadas y salió la tarta maravillosa, bonita, masculina, obra de Nilda de Delicias y Mimos, se soplaron las velas se cantó el cumpleaños feliz de rigor y comezaron los discursos. Muy emocionante el de Escobar, en toda su grandeza, dirigiéndose a Dominik con una frase evocadora de su forma de andar, que es su forma de ser y de caminar por la vida, con una dignidad a prueba de bombas, y alabó, con gran gracia y señorío el estilo, la clase y la gracia de las señoras de Palma, que a un señor como el acostumbrado a tratar con las más elegantes del mundo, estoy seguro, esa noche maravillaron. A él y a todos. Después habló Clarissa, la hermana pequeña, en alemán porque lo que le decía era muy intimo, muy sentido. Aquí, a los que sabemos y conocemos nos costó contener las lágrimas. Dominik es la roca, el pilar sobre el que se sustenta una de las familias más conocidas pero discretas de Alemania. Desde Palma, y desde la independencia de quien ha elegido vivir la vida que quería sin olvidar nunca quien es y a quien pertenece. La fiesta continuó con el champany servido por Juan Luis Pérez de Eulate de la Vinoteca, esplendido, y los gin tónics de Gin Mare con tónica de Fever Tree, lo mejor que en esas terrazas, volando sobre los plataneros del Borne, literal, sabían a gloria. Difícil acabar la Nata como difícil fue acabar la noche. Por cierto, Llongueras Elite de Toni Iglesias, abrió en domingo para peinar a las invitadas que lo solicitaron . Un detallazo que me piden encarecidamente que desde aquí agradezca. Así lo hago. Con esta Nata concluye la ilusión de un año pero continúa la historia con un regalo maravilloso, un viaje, que también les contaré.
