El doctor Rubén Rial asegura que "en invierno se duerme más que en verano" y que los cambios de hora, "sobre todo el adelanto de los relojes, más que el atraso, causan numerosas perturbaciones, no solo en el sueño, sino también en muchas otras actividades", manifestándose un "aumento en el número de accidentes de tráfico y de problemas de salud".