"Esto parece un circo", ironizó Marlene Dietrich cuando vio la gran cúpula de cristal que cubría la terraza de Tito´s, donde actuó en 1973. La diva de origen alemán se las hizo pasar canutas a Paco Moyà, director de escena de la más importante sala de fiestas de Mallorca. Exigió por contrato que la acompañaran doce músicos, que vinieron desde Barcelona a propósito, y después despidió a unos cuantos... Su llegada a Palma fue problemática desde el principio. "No quería abrir las maletas en el aeropuerto. Venía de París, donde se había enfrentado con los fotógrafos, era muy especial...", recuerda Moyà. La vedette es solo un nombre más de las celebridades que pasaron por este mítico local. La inolvidable intérprete de Lili Marlen actuó dos veces ese año en España y una de ellas fue en Tito´s.

Hubo una época en que había que vestir traje y corbata para entrar en Tito´s, en la que lo mejorcito de la música pasaba por esta sala de fiestas, conocida por ser la más importante de Mallorca (durante mucho tiempo la única) y uno de los mejores locales de Europa. Quienes eran alguien, o pretendían serlo, acudían a ver el espectáculo y pedían champán francés. "Había gente que ni sabía como beberlo", comenta Pep Guasp Bibiloni, jefe de sala durante 18 años. Médicos prestigiosos, empresarios, artistas e incluso los reyes, cuando estaban en la isla, se dejaban ver en Tito´s.

No es una exageración, quienes eran jóvenes en los 60 y 70 se acuerdan perfectamente del local, con su gran terraza cubierta, con aquella sala en la que el público, distribuido por mesas, contemplaba la actuación de los artistas sobre el escenario. La edad dorada de Tito´s, aunque se abrió en 1923, coincidió con la llegada del turismo de masas a Mallorca y quizás esta coincidencia fue lo que hizo posible colocar a la isla dentro del panorama musical internacional. Muy cerca, otros locales como Mónaco, Minims, Joes, La Rueda y El Patio contribuyeron a crear una zona de diversión.

Hace tan solo unas semanas que se cumplieron los 55 años de la gran fiesta de inauguración de Tito´s. Fue el 21 de abril de 1955. Con la perspectiva de los años, quizás lo de menos fuera que una jovencísima Esperanza Roy debutara ese día, no como actriz, sino como bailarina española. Y el tiempo transcurrido también ha hecho más que relevante que estuviera acompañada al piano por Luis Enrique Bacalov, músico argentino que muchos años después ganaría un Oscar por la banda sonora de El cartero y Pablo Neruda. Y que ese día, como vocalista, actuara Monna Bell, cantante chilena que después llegó a grabar con The Platters My prayer y actuó durante un año completo en Nueva York, sin olvidar que con la canción El telegrama triunfó en España y en medio mundo.

Fama internacional

Sí, Tito´s no era un local nuevo, funcionaba desde la década de los 20 del siglo pasado, pero a finales de los 50 se produjo un cambio. Un empresario ruso compró la sala de fiestas, que hasta el 57 había pertenecido a Antonia Jaume y Antonio Capllonch. Su nuevo propietario llegó a construir su vivienda sobre Tito´s. Moyà recuerda que el magnate llegó a la isla con 100 millones de pesetas de aquella época y que en su apartamento organizaba muchísimas fiestas. A sus invitados les regalaba caros mecheros Dupont... Este ritmo de vida fue acabando con su fortuna, rememora el antiguo director de escena, y el ruso fue vendiendo acciones de la discoteca. Años después, el local pasaría a manos de otros empresarios, un francés y un inglés. Actualmente pertenece al empresario Tolo Cursach.

Mina, Shirley Bassey, Pétula Clark, Ertha Kitt, Charles Aznavour, Sacha Distel, que fue desnudado literalmente por sus fans nada más entrar en la discoteca, Ray Charles, Frankie Vaughan, Domenico Modugno, Johnny Clark€ pasaron por el escenario de Tito´s durante esos años dorados y algunos más de una vez, como Ray Charles. En la sala de invierno, una más pequeña que la gran terraza cubierta, La Faithia, una bailarina exótica bellísima, protagonizó un número calificado de "sensual" por Pep Guasp y de streep-tease por otros, en la Nochevieja de 1957. Por supuesto, aquella actuación fue toda una sorpresa, sin anuncios previos.

No hay que olvidar que pese al desarrollo que se producía en la isla, todavía imperaba el franquismo y una férrea censura. Hasta tal punto, que durante una de las de las actuaciones de Line Renaud, que cantaba Bolero balear, una bailarina se desnudaba tras una pantalla. Al finalizar la canción, la bailarina debía salir ante el público y mostrarles que llevaba una malla puesta, despejando cualquier duda sobre su desnudez€

Artistas locales

Quienes forman parte del pasado glorioso de Tito´s son muchos, y también de aquí, no hay que olvidarlos. Los Valldemossa, Margaluz, o la orquesta Musilandia, cuyo batería, Toni Felani, lo fue también de Los Javaloyas. Si en algo coinciden todos los testimonios recabados, es en que disfrutaban trabajando allí.

Desde finales de los 50 y durante los 60 y 70, los detalles se cuidaban hasta el extremo. Jordi Garau trabajó en el departamento de administración de la sala de fiestas en los 70, y aunque poco tenía que ver con el mundo que se vivía de noche en Tito´s, sí recuerda perfectamente que "era un fenómeno social. Normalmente había que entrar con traje y corbata los hombres, y las mujeres con vestido, pero cuando era un día de gala, se exigía el frac y el vestido de noche para ellas". Garau no duda en afirmar que en aquel entonces era "la primera sala de fiestas de Mallorca y una de las más conocidas en Europa". La exigencia de una vestimenta correcta era para todos, incluso para los personajes los famosos. "Si llegaba uno sin chaqueta y corbata, o se volvía al hotel a cambiarse o se le prestaba", añade Guasp sobre la etiqueta.

El dinero entraba en grandes cantidades en su departamento, pero también se iba fácilmente, porque los artistas era de primera fila y "cobraban mucho". Paco Moyà recuerda con especial cariño a Alfredo, un cómico que tocaba la batería. "Era lo mejor que ha pasado por la sala de fiestas €afirma sin dudas el director de escena€ pero los dueños lo querían despedir porque el número era muy largo. Y era verdad. Pero les pedí que me dejaran cambiarlo. Lo recorté y adquirió un timing impresionante... la gente se ponía de pie. La primera vez que vino a la sala cobraba 4.000 pesetas por día, en el año 71. La segunda vez, con el éxito que consiguió, pedía 40.000 pesetas". Sin embargo, entre Moyà y este artista se estableció una relación muy especial, debido al trabajo que hicieron con su espectáculo y Alfredo siempre tuvo preferencia por Tito´s.

Ya en la década de los 80, la sala de fiestas también acogió las actuaciones de artistas españoles como Lola Flores, Carmen Sevilla, Rocío Jurado, Rocío Dúrcal, Camilo Sesto, quien cantó en estas Galas OTA con el dedo meñique escayolado por una lesión... Había una actuación cada domingo, organizada especialmente para el turista nacional por Agustín Pinillos, de El Club de Vacaciones. No se puede obviar que Tito´s seguía siendo un reclamo turístico dentro y fuera de España. Preguntado sobre si estos artistas eran más fáciles de llevar que los internacionales, Paco Moyà responde que "son especiales, todos tienen sus cosas, por eso se llaman artistas".

Del glamur de ese Tito´s de los 60 y 70 queda el recuerdo y el edificio, aunque con cambios. La cúpula de cristal y hierro, creada en 1968 por el Estudio Lamela Arquitectos, fue pintada de negro. Su famoso ascensor no siempre estuvo ahí. Durante la época de la que hablamos, la entrada a Tito´s estaba situada en la plaza Gomila, donde un portero muy bien uniformado, daba la bienvenida. Quienes no iban adecuadamente vestidos, tenían la posibilidad de alquilar una chaqueta y corbata allí mismo. La sala de fiestas ofrecía además, según puede verse aún en los antiguos folletos publicitarios, un servicio de fotografía para inmortalizar la visita. De esas décadas de éxito también han perdurado las letras que podrían definirse como la marca de Tito´s Night Club, diseñadas por Hilario González. Durante esos años, sobre la sala de fiestas se montó el Bora-Bora, un restaurante "muy bueno", según coinciden en afirmar todos los consultados, en el que se servían cócteles exóticos para aquella época, como la piña colada.

El fin de una época

La sala de fiestas llegó a contar con tres orquestas, dos cuerpos de baile español, uno inglés... Pero en todo negocio hay que renovarse o morir, y Tito´s no lo hizo. Llegó un momento en que los artistas no eran lo que el público quería, comenta Paco Moyà. "Los dueños se equivocaban y contrataron a grupos que no gustaron tanto. Por algo nos llamaban las pequeñas Vegas...".

En el 85 cerró, se reformó y volvió a abrir como discoteca. Si hubiera continuado como una sala de fiestas de primera categoría, su director de escena hubiera continuado: "Pero me aburrí y la noche quema mucho", se explica Moyà.

En este repaso a la historia más pletórica de la sala faltan por nombrar muchos, como Toni Ferrer, ya fallecido, y que estuvo al frente de Tito´s mucho tiempo. Seguro que habrá otros indispensables en esas décadas, porque fueron muchos los que trabajaron por ofrecer actuaciones de primer nivel, sobre el escenario y tras él, o en la sala, atendiendo a los clientes, sirviendo champán, gin tonics, y las bebidas de moda.