James Fuckyou es un simpático "hooligan" británico. Ha pasado los diez últimos meses de agosto tan borracho que no solo es incapaz de determinar a qué aeropuerto llegó de vacaciones, sino de qué aeropuerto inglés partió, aunque su madre se extrañaba de que siempre regresara abrazado a una misteriosa caja octogonal que contenía un mejunje dulzón.