Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Servicio doméstico: guía para evitar los abusos
B. Ramon
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.
Mónica y Carolina trabajaban de empleadas de servicio doméstico en Colombia. Ahora, recién aterrizadas en Mallorca, no saben cuáles son aquí las reglas del juego en este sector, en el que aún queda mucho abuso impune, como relatan a Cáritas algunas de las personas que acuden en busca de trabajo: de empleadores que les piden que “les den un besito” a los que no les dan “ni un día libre”.