Mini ha presentado este martes en Rotterdam (Holanda) su primer modelo 100% eléctrico, el Cooper SE, que llegará al mercado con una autonomía de hasta 270 kilómetros y con 184 caballos de potencia.

Según informó la compañía, el Cooper SE se ensamblará en la planta de la marca en Oxford (Reino Unido), junto con las variantes de combustión interna del modelo, mientras que su sistema de propulsión se fabricará en los centros de Dingolfing y Ladshut, ambos en Alemania.

El primer eléctrico de Mini puede recargar su batería mediante una toma de corriente doméstica, una 'wall box' o en estaciones de carga públicas, y es compatible con el sistema de carga rápida de corriente continua de hasta 50 kilovatios, con el que alcanza el 80% de carga en 35 minutos.

En cuanto al diseño, el modelo se distingue de las variantes de combustión interna por la parrilla, la ausencia de escape y por incorporar emblemas específicos. En el interior, también resalta la falta del túnel central de transmisión.

El sistema de infoentretenimiento está compuesto por una pantalla táctil de 6,5 pulgadas y es compatible con Apple CarPlay. Por su parte, el sistema opcional Connected Navigation Plus incluye una pantalla de 8,8 pulgadas y carga inalámbrica para el teléfono móvil.

Mini presentó el prototipo de su primer vehículo 100% eléctrico en el Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt de 2017, en línea con la estrategia de electrificación del grupo BMW, matriz de la marca.

La compañía destacó que la llegada de este modelo supondrá aumentar el componente emocional de la electromovilidad, al combinar diversión en la conducción, con diseño y personalidad propia, que son características propias de la marca británica.