Emotiva despedida a Pere Sampol en Mallorca: “No te irás nunca de nuestros corazones ni de nuestros recuerdos ni de la memoria de los mallorquines”

Más de mil personas despiden al histórico dirigente del PSM fallecido, Pere Sampol, en un sentido homenaje en el cementerio de su pueblo, Montuïri

B. Palau

B. Palau

Montuïri

El cementerio de Montuïri se quedó pequeño ayer ante la talla humana y política de Pere Sampol. Un ramo de rosas rojas y rosas destacaban tras otras flores amarillas. La senyera de la Obra Cultural Balear (OCB) presidía un atril en la entrada del camposanto. Tal como había dispuesto el histórico dirigente del Partit Socialista de Mallorca (PSM) fallecido el pasado viernes por la noche a los 73 años de edad, su despedida caló hondo. No faltó la música tradicional mallorquina, el flabiol, el tamborino o la xeremia. Tampoco las canciones de Lluís Llach y Ovidi Montllor. Fue un adiós cargado de simbolismo, sentimiento, también reivindicativo e ideológico, y muy emotivo. Un adiós a la medida de Pere Sampol, en el que las lágrimas y los aplausos brotaron al son de La Balanguera.

Más de mil personas se congregaron ayer por la tarde en el cementerio de Montuïri en un sentido homenaje al que fuera vicepresidente del Govern balear, vicepresidente del Consell de Mallorca, senador y regidor del Ayuntamiento de su pueblo, Montuïri. Centenares de coches aparcados a las afueras del recinto, en la cuneta de la carretera, hacían prever que el acto sería multitudinario.

Veteranos políticos del PSM, representantes de Més per Mallorca, dirigentes del PSIB, representantes del Govern del PP, personalidades de entidades como la OCB y de la cultura mallorquina, profesores e investigadores universitarios de la UIB, allegados, compañeros, amigos y vecinos de Pere Sampol acudieron a su despedida para arropar a su familia.

Entre los asistentes al acto de homenaje se encontraba la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, que se quedó en un discreto segundo plano y se mostró muy afectada; el vicepresidente del Govern balear, Antoni Costa; los consellers Catalina Cirer y Jaume Bauzà; el delegado del Gobierno, Alfonso Rodríguez; el líder de Més per Mallorca, Lluís Apesteguia, y multitud de políticos de esta última formación como Vicenç Vidal, Neus Truyol, Bel Busquets, Biel Barceló, Joan Mas o Fina Santiago, entre otros.

La despedida se inció destacando los valores de Sampol: «Pere era un buen maestro. Siempre respetó las normas y los derechos constitucionales. Ha luchado por su gente, por su pueblo, por la nación. Destacaría tres palabras de él: fidelidad, liderazgo y honestidad».

Toni Llabrés, presidente de la OCB, subrayó el compromiso del exlíder del PSM con la entidad: «Fue un defensor de nuestra lengua y la cultura. Era un hombre discreto, pero también de acción, divertido, con sentido del humor. Doy las gracias a la vida por haber conocido a Pere Sampol, por haber compartido con él tiempo y espacio. Pere, nos convenciste de que otra Mallorca era posible. Preservaremos tu legado».

El líder de Més, Lluís Apesteguia, recordó la «mala vida» que dio Sampol a la derecha de este país. «Él supuso la esperanza y la ilusión de que era posible trazar un camino diferente al que nos venía marcado. Fue tremendamente generoso», indicó Apesteguia.

La alcaldesa de Montuïri, Paula Amengual, se mostró emocionada ante su «tío Pere». Según explicó, «hace 15 días me lo encontré y me dijo que quería crear una escuela de billar, lo vi tan ilusionado. Fue un gran defensor de la tierra, de Mallorca, con una gran capacidad de análisis. Era discreto y humilde. Tenía un profundo respeto hacia las instituciones y las personas que las representan más allá de los colores políticos. Gracias Pere por el trabajo bien hecho y por marcar el camino, has sido un referente, nos has dado una lección».

El histórico dirigente nacionalista Damià Pons habló de la Mallorca «justa, libre y digna que tú defensaste», de la lucha por la sostenibilidad, por el territorio, por la cultura y la lengua catalana. «Has sido una voz crítica, firme y rigurosa. Tenías dentro de la cabeza y el corazón un proyecto. El mallorquinsimo nacionalista. Has amado Mallorca hasta el último rincón de tu alma. Pere, vi tu firmeza, creatividad y solvencia técnica. Desde hace 48 horas los medios de comunicación dicen que te has ido. Pere, no te irás nunca de nuestros corazones ni de nuestros recuerdos ni de la memoria de los mallorquines. Pere, gracias por haber vivido», se despidió Damià Pons. 

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