Despedido por ir a jugar al pádel mientras estaba de baja médica

Un empleado de una conocida empresa cárnica de Mallorca ha sido despedido por dedicarse a jugar al pádel durante el periodo en el que se encontraba de baja laboral, precisamente por una lesión en una cadera. Una reciente sentencia dictada por el TSJB ha ratificado la legalidad del despido, lo que representa que este empleado se desvincula de la empresa y, además, no recibe ni un solo euro de indemnización. Los jueces interpretan que la empresa se sienta engañada por la actitud de este empleado, ya que la actividad deportiva que estaba realizando es incompatible con la lesión que justificó la baja laboral. Es decir, la empresa sospechó que esta baja médica había sido un invento.

Este trabajador llevaba alrededor de diez años contratado en esta empresa. Su labor era la de conductor, que además de repartir el género, también se encargaba de preparar los pedidos. Los repartía con un vehículo de la empresa.

Fue en el mes de agosto del año 2023 cuando el conductor presentó a la empresa un parte de baja. El certificado médico indicaba que presentaba un diagnóstico de artrosis degenerativa en su cadera derecha. Por lo tanto, esta lesión le impedía acudir a su puesto de trabajo. Precisaba de varias semanas de baja para curarse de esta lesión.

La empresa sospechó de inmediato de que podía tratarse de una baja médica simulada. Es decir, el trabajador se podría haber inventado esta lesión para no acudir al trabajo, ya que de baja tenía garantizado el cobro del sueldo.

El empleado fue vigilado durante varios días y de esta forma se descubrió el fraude. A pesar de que la lesión que, según él, le impedía acudir a trabajar, en cambio no le afectaba para poder practicar el deporte del pádel. Al tercer día de presentar la baja médica se confirmó que había acudido a unas pistas situadas en un hotel de la Playa de Palma y había jugado una partida de pádel. Y lo mismo ocurrió en las tres semanas siguientes. Parece que acudía una vez por semana para mantener este encuentro.

Ante este descubrimiento la reacción de la empresa fue inmediata: acordó el despido fulminante del veterano trabajador. En la carta que le entregaron se señalaba que le habían visto realizar durante las partidas movimientos, saltos y giros bruscos de cadera, que eran incompatibles con la lesión por la que había presentado el parte de baja laboral. La empresa mantuvo que era imposible que, si era cierta la artrosis que sufría en la cadera, pudiera realizar los movimientos físicos que precisa este deporte. Para practicar el pádel se realizan movimientos articulares con la cadera, a la vez que se flexiona la pierna y se golpea la pelota con la pala. 

En la carta se le indicaba al trabajador que podría estar cometiendo un fraude, sobre todo teniendo en cuenta que el sueldo que cobraba mientras estaba de baja, lo abonaba tanto la propia empresa, como la Seguridad Social. 

La decisión de la empresa, al confirmar la participación de este trabajador en estas actividades deportivas, fue acordar su despido inmediato, sin ningún tipo de indemnización económica.

El trabajador se opuso a la decisión de la empresa, bajo el argumento de que este deporte no era incompatible con el proceso de recuperación que había iniciado para resolver sus problemas en la cadera. Y para ello presentaba un informe de un médico, que confirmaba su teoría.

Sin embargo, el tribunal sí considera que la actuación de este trabajador fue fraudulenta, porque la práctica de un deporte tan exigente como es el pádel es incompatible con una lesión de artrosis en la cadera. La sentencia recuerda que existe una amplia jurisprudencia, que establece que se justifica un despido cuando un trabajador, estando de baja médica, realiza una actividad que perjudica su recuperación. Esta actitud supone que se está cometiendo un fraude en el proceso de incapacidad laboral. 

Los jueces han tenido muy claro que una persona que realmente sufre esta lesión en la cadera no podría practicar un deporte como es el pádel.