El Departamento de Felicidad de Habitissimo

ctv-zn0-habitissimo

ctv-zn0-habitissimo

Matías Vallés

Matías Vallés

Habitissimo presumía el pasado marzo de que nueve de cada diez de sus empleados mostraban un orgullo tan radical por trabajar en la empresa que la consultora Great Place to Work (nombre registrado) la destacaba entre los Mejores Lugares para Trabajar. Es un análisis valioso, cuando el noventa por ciento de los trabajadores susodichos se disponen a ser despedidos.

Además de poner en solfa los estudios sobre empleadores óptimos, la coincidencia obliga a titular que «Habitissimo despide a los empleados que estaban orgullosísimos de trabajar en Habitissimo». Por fortuna, esta plataforma multipremiada dispone de un Departamento de Felicidad. Si sus responsables no han sido también despedidos, se les amontonará la tarea para mantener el buen humor de los eliminados.

Habitissimo funciona con un Departamento de Felicidad porque se niega a utilizar el «concepto Recursos Humanos, pues no consideramos a las personas un recurso más». Tampoco queda claro si las considera «humanas», dado el difícil encaje del trato dispensado con ese adjetivo. En todo caso, y para tranquilidad de las consultoras que conceden premios de hojalata, no cabe descartar que el diez por ciento de supervivientes de Habitissimo sigan considerando que es el mejor lugar del mundo para trabajar.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents