La fundación Impulsa advierte que Baleares está a la cola de la sostenibilidad turística
El economista Antoni Riera llama a «conectar el turismo con la senda del crecimiento y el bienestar» y revertir los desequilibrios
La entidad presenta la tercera revisión de su Índice de desarrollo turístico, el archipiélago ocupa el puesto número once entre 325 regiones

Antoni Riera durane la conferencia '¿Ha llegado el momento de ser disruptivos en turismo?', este lunes en el CaixaForum, en Palma. / Impulsa
Baleares, a pesar de su liderazgo internacional, está a a la cola de la sostenibilidad turística en un contexto en el que es ineludible «conectar el turismo con la senda del crecimiento y el bienestar» en un destino pionero al que ahora le toca «ser disruptivo». La fundación Impulsa Balears presentó ayer su nuevo Índice de desarrollo turístico, y su director técnico, Antoni Riera, llamó a que el archipiélago «aproveche» su capacidad para revertir los desequilibrios que frenan su competitividad.
El economista advierte que, entre 325 regiones, tener la tercera planta de alojamiento hotelero con más plazas ya no es suficiente. Hay que apostar por la innovación y la sofisticación, el talento y la tecnología, además de hacer frente a la saturación turística, la rotación excesiva, con turistas que acortan sus estancias, o «la estacionalidad y la volatilidad de la demanda».
Baleares ocupa el puesto undécimo en el ranking global del Índice de desarrollo turístico, pero en sostenibilidad de la demanda turística cae hasta el puesto 308 en esta clasificación que reúne a 325 regiones de 45 países distintos.
Riera, en un adelanto de la presentación que hará en Fitur —en el estand de Baleares y también en el de Turespaña, la feria turística se inaugura el 22 de enero— pronunció la conferencia ¿Ha llegado el momento de ser disruptivos en turismo?, en CaixaForum, en Palma. El acto, presentado por la directora territorial de CaixaBank, María Cruz Rivera, y la actual presidenta de Impulsa, Carmen Planas, fue inaugurado por Marga Prohens. La jefa del Ejecutivo balear, además de destacar la labor «del principal think-tank de las islas», se refirió al papel de Riera en el diseño de la metodología que están desarrollando las mesas contra la saturación en el Pacto por la Sostenibilidad. Recordó que va a concluir la primera fase de diagnóstico de dicho proceso, del que el Índice de desarrollo turístico también forma parte.
Esta es la tercera actualización del índice (anteriormente conocido como Índice de competitividad turística), tras su presentación en 2019 y su actualización de 2022. En él se analizan 95 indicadores.
Riera repasó el papel del turismo en sus inicios como «gran generador de riqueza y ocupación» y su rol multiplicador, que ahora se ha de transformar en «un aliado proactivo capaz de revertir los desequilibrios que frenan la competitividad sostenible de archipiélago» y, a la vez, «dar una repuesta local al cambio global» ante el cambio climático, la contaminación, la sobreexplotación de recursos y la presión demográfica. Para 2040 las previsiones apuntan que se llegara a 2.400 millones de viajes, lo que supone más de mil millones respecto a la cifra actual.
Urge «dar una repuesta local al cambio global» ante el cambio climático o la presión demográfica
Ante el actual «modelo complejo» del turismo, después de siete décadas de evolución, hay que dar respuesta al reto de gestionar una afluencia de visitantes creciente y diversa y, «sobre todo», al de «conectar el turismo a la senda del crecimiento y el bienestar regional». Ya no valen los cambios que respondan a «una fase desarrollista».

Índice de desarrollo turístico, top de las 20 regiones punteras / Fuente: Fundación Impulsa Balears / DdM
Baja renta per cápita
Riera cuestiona el liderazgo turístico de Baleares en una región en la que en PIB per cápita ocupamos el puesto 140, lo que demuestra que no está aprovechando sus capacidades.
Haber logrado desarrollar una notable planta de infraestructuras y equipamientos no significa obtener un alta puntuación en la actual noción de desarrollo turístico. Baleares ocupa el puesto número tres en intensidad turística, medida a través del número de plazas de alojamiento, y el puesto 11 en el Índice de desarrollo turístico. Mientras, la turca Antalya, la primera en capacidad alojativa, ocupa el puesto 266 en el ranking global. «Hoy el liderazgo turístico pasa por ser excelente» y Baleares no es excelente es «intensiva», subraya el director de Impulsa. Por ello, llama a apostar por la innovación y la sofisticación, el talento y la tecnología. Si en épocas anteriores se ha conseguido ser pioneros, hoy hemos de conseguir ser «disruptivos».
«Hoy el liderazgo turístico pasa por ser excelente» y las islas no lo son, son «intensivas»
El economista advierte que las buenas posiciones del archipiélago en conectividad aérea, sus instalaciones y servicios turísticos, entre otras, en la actualidad resultan insuficientes para que el turismo favorezca el progreso regional y vuelva a situar a las islas entre las regiones más prósperas de la Unión Europea.
Madrid, Cataluña y la región del lago de Ginebra, a la cabeza
De acuerdo a la tercera revisión, con periodicidad trianual, del Índice de desarrollo turístico desarrollado por la fundación Impulsa Balears estas son las regiones que conforman el top ten: Madrid, Cataluña, la región del lago de Ginebra, la región Capital de Dinamarca, la Comunidad Valenciana, Andalucía, Canarias, Isla de Francia, Zúrich y Baja Austria y Viena son las diez primeras.
Les sigue Baleares en el puesto undécimo. Entre las regiones españolas ocupa el sexto lugar.
El director técnico de Impulsa, Antoni Riera, pone el acento en los retos en sostenibilidad turística para el archipiélago. Con 325 regiones en total, en la clasificación disgregada (se distinguen 95 indicadores) en cuanto a sostenibilidad de la demanda turística las islas caen hasta el puesto 308. La única región española por detrás es Cantabria, que figura en el puesto 312. En sostenibilidad ambiental Baleares ocupa la posición 128. Y en el pilar de contribución socioeconómica está en el puesto 14.
En la concentración de partículas en la atmósfera las islas ocupan la posición 171. En la regulación nacional sobre eficiencia energética, la 198, y en estrés hídrico, el puesto 293. En recursos culturales el archipiélago está en la posición 80, en preparación tecnológica, en la 88 y en transporte marítimo y terrestre, en el 106.
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