Mercedes de la Presa García (1928-2023) fue una mujer luchadora y defensora de sus valores y de los de las personas que la rodeaban. Se crió en Santa Cruz de Tenerife, donde vivió hasta los 24 años, cuando se mudó a Mallorca tras casarse con un marino mercante de Santanyí.

Activa e inquieta, al llegar a la isla reactivó la Asociación de Amas de Casa Nuredduna, la cual presidió durante muchos años, hasta que finalmente recondujo el objetivo de la entidad convirtiéndola en la Asociación de Amas de Casa y de Defensa del Consumidor Nuredduna.

Dedicó gran parte de su vida a trabajar en el ámbito de la regulación y el control de calidad del consumo en una época en la que el sector todavía se estaba edsarrollando. Siempre estuvo en contacto con el mundo empresarial y político para defender los derechos de los consumidores y regular su legislación. Además, fue una mujer muy activa en los medios de comunicación locales, sobre todo en prensa y radio.

A menudo viajaba a reuniones y congresos por todo el país para defender su cruzada, y llegó a entrevistarse con responsables políticos locales y estatales.

Debido a su labor, recibió numerosos reconocimientos a lo largo de su carrera, entre los que destacan el premio Importantes Diario de Mallorca y el Siurell de Plata otorgado por el Govern de les Illes Balears en 1996.