Opinión

Prohens tiene la mayoría de Sánchez

Marga Prohens (centro, en la reunión del comité ejecutivo del PP balear.

Marga Prohens (centro, en la reunión del comité ejecutivo del PP balear. / Guillem Bosch

Matías Vallés

Matías Vallés

Marga Prohens es la única candidata posible a presidir Balears, y con toda probabilidad será coronada antes del tope del 28 de julio gracias a sus 26 diputados. Sin embargo, se engaña al presumir de «la mayoría suficiente», que un Parlament con 59 escaños sitúa en treinta. Aunque las matemáticas no precisan de perspectiva histórica, Jaume Matas en 1999 y el mismo Matas en 2007 no pudo gobernar con 29 asientos, una «mayoría más que suficiente» en los análisis desencaminados del PP balear.

El triunfo claro pero insuficiente del PP puede verse empañado por un error de cálculo, una carencia que la diputada nacional Prohens debe apreciar mejor que nadie. Sus 26 diputados en una cámara de 59, se corresponden exactamente con los 152 parlamentarios sobre 350 actas del Congreso (Feijóo suele aumentarlas a «360») que configuraron en Madrid el Gobierno PSOE/Podemos de Sánchez.

El destino ha querido que Prohens tenga la mayoría parlamentaria de Sánchez, que la futura presidenta de Balears ha criticado con dureza como insuficiente, Frankenstein y raíz de las desgracias que aquejan a España. No es estrambótico afirmar que la candidata del PP presidirá el Govern gracias a que Sánchez no contaba con una «mayoría suficiente».

La ventaja de Prohens es que solo necesita a cuatro diputados de Vox para coronar una mayoría, esta sí, suficiente. Salvo que Més, por lo visto intercambiable con el partido anterior y desde siempre con dependencia freudiana del PP, insista en neutralizar a la ultraderecha moderada tras haber hecho lo propio con la izquierda inmoderada.

El precio del poder en Balears se eleva a treinta diputados, y está en manos de los ultraconservadores. Prohens pretende que Vox le rebaje notablemente el coste a 26, olvidando que esta concesión graciosa también supone un pacto con Jorge Campos, véase al PSOE propiciando con su abstención la investidura de Rajoy en 2016.

Dado que la mención en campaña a Castilla y León provocaba crujidos en las mandíbulas de Prohens, cabe recordar que la vicepresidencia de Vox en esa comunidad, más la presidencia de las Cortes y otras tres consejerías, se sustenta en que el PP necesita un refuerzo de 11 diputados en un parlamento de 81. En Balears equivaldrían a un margen de ocho, pero la urgencia es idéntica.

Prohens necesita a Vox. Solo Vox, y no Prohens, decidirá si prefiere mantenerse al margen de las instituciones de Balears, la misma medida adoptada por Podemos en 2015. En efecto, en el caso de que la ultraderecha moderada renuncie a su premio, desaparecerá del mapa electoral a mayor velocidad incluso que Ciudadanos.

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