La limitación del precio del alquiler se extenderá por toda Baleares

El Govern prevé que prácticamente la totalidad de las localidades de Baleares sean declaradas zonas tensionadas, lo que supondrá que les afectará la nueva ley de vivienda que, entre otros términos, supondrá una limitación de la subida de los precios de alquiler.

Para realizar esta selección, el Consell de Govern ha aprobado este martes la creación de una comisión de impulso y coordinación de las políticas de vivienda en Baleares. Será un grupo con funciones consultivas y de asesoramiento.

Según ha explicado el conseller de Vivienda, Josep Marí, esta comisión nace con el objetivo de coordinar las políticas sobre viviendas que se realizarán en Baleares, con el objetivo de que se cumpla el compromiso de que todos los ciudadanos puedan tener acceso a una casa. Esta comisión se encargará de coordinar las decisiones sobre este tema con otras instituciones, sobre todo con la Administración General del Estado, para diseñar y financiar los planes y programas relacionados con las políticas de vivienda.

Esta comisión estará formada por once expertos, de diferentes instituciones.

Una de las primeras labores que tendrá que afrontar esta comisión es aplicar la nueva ley de vivienda que está a punto de salir adelante tras pasar el filtro del senado. Esta ley de aplicación nacional establece que sean las comunidades autónomas, en función de sus propias características, las que determinen qué áreas deben ser calificados de zonas tensionadas. Serán en estas zonas donde se aplicarán los límites sobre los precios de alquiler, limitando las subidas de los contratos. Esta elección de zonas se decidirá por municipios y no por barriadas. Ello supone que prácticamente la totalidad de los municipios de Baleares tendrán esta calificación, ya que la elevación de los precios del alquiler es un fenómeno que se ha extendido por casi todo el archipiélago. Por tanto, el límite del alquiler se aplicará en prácticamente todos los núcleos urbanos de Baleares.

El conseller Marí detalló que esta calificación deberá revisarse cada tres años. Señaló que la ley establece diferencias entre grandes y pequeños tenedores, en función del número de viviendas que se poseen. La limitación de los precios afecta tanto a un grupo, como a otro, si bien los propietarios de pocas viviendas se podrán beneficiar de ventajas fiscales, a cambio de limitar el aumento del precio del alquiler.

El titular de la conselleria de Movilidad y Vivienda señaló que la ley, a la hora de distinguir entre gran o pequeño tenedor, solo cuenta el número de inmuebles, ya que ni los garajes, ni trasteros, ni otras propiedades, no se incluyen en este cómputo.

La nueva ley obliga a los pequeños propietarios a mantener congelados los contratos de alquiler durante un periodo de tres años. Después las subidas están limitadas en función del IPC. Sobre los nuevos contratos, el precio se debe actualizar y también se limita la subida del alquiler al nuevo inquilino.

El conseller, en contra de la opinión de los constructores, se mostró optimista de que esta ley nacional sobre la vivienda permitirá a muchas personas a acceder a una casa de alquiler a un precio razonable.

Ni garajes, ni trasteros se incluyen en la ley

El titular de la conselleria de Movilitat i Habitatge señaló que la nueva ley de la vivienda, a la hora de distinguir entre gran o pequeño tenedor, solo cuenta el número de casas en propiedad. No se incluyen ni los garajes, ni trasteros, ni otras propiedades que no se utilicen como vivienda. La ley habla de inmuebles, pero el conseller aseguró que se refiere a viviendas que pueden alquilarse. Marí se mostró en contra del pronóstico de los constructores, que aseguraron que la ley sacará muchos pisos del mercado de alquiler.