El GOB busca un nuevo local ante la venta de su histórica sede

El edificio donde ha estado el grupo ecologista durante décadas, situado en la calle Manuel Sanchis Guarner, ha sido transferido en herencia y la nueva propiedad quiere venderlo

Imagen de la sede del GOB, ubicada en la calle Manuel Sanchis Guarner de Palma.

Imagen de la sede del GOB, ubicada en la calle Manuel Sanchis Guarner de Palma. / DM

Redacción.

El grupo ecologista GOB está buscando un nuevo local en Palma. El edificio donde ha estado durante décadas su histórica sede ha sido transferido en herencia y los nuevos propietarios han decidido ponerlo a la venta. Desde el grupo ecologista dejaron claro que no son víctimas del alza de los precios del alquiler que se vive en Mallorca, apuntaron que siempre ha habido muy buena relación con la propiedad y que han llegado a un acuerdo para salir del histórico edificio situado en la calle Manuel Sanchis Guarner.

Una comisión de la entidad ecologista, según ha podido saber este periódico, está estudiando posibles nuevas ubicaciones para reinstalar las oficinas del GOB. Desde este local se han celebrado reuniones de mucho calado para del medio ambiente de Mallorca. Es el caso de la organización de manifestaciones y movilizaciones como la que consiguió demoler los polémicos apartamentos de ses Coventes o manifestaciones multitudinarias como la del 2006 contra la política expansionista en la construcción del Govern de Jaume Matas. Entre las paredes de la sede del GOB de la calle Manuel Sanchis Guarner también ha habido encuentros de importancia política para Balears.

El grupo ecologista GOB ha puesto un anuncio en su boletín informativo que remite a sus socios y simpatizantes donde explica que está buscando un nuevo local en Palma. Precisan de un mínimo de cuatro espacios para oficinas, sala de reuniones, almacén y naturalmente baño. El anuncio también hace un llamamiento a sus socios y simpatizantes a que si conocen de alguna ubicación lo comuniquen a los dirigentes de la entidad que preside Amadeu Corbera.

Desde el grupo ecologista apuntan que no son víctimas de la vorágine del incremento del precio del los alquileres. No obstante, se han visto afectados por la problemática de la vivienda. Una situación que está provocando que una entidad histórica se esté quedando sin sede.

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