El gasto de los turistas en restaurantes y tiendas de Mallorca se dispara este invierno

Si se buscan señales en Mallorca respecto a la intensidad de la campaña turística que se avecina, los datos que el comercio y la restauración están registrando en pleno invierno en relación a su facturación llevan a vaticinar a ambos sectores que se está a las puertas de una Semana Santa y de un verano «excelentes». Las cifras que exponen algunos negocios se reconocen como «excepcionales»: hay establecimientos de grandes firmas comerciales que han registrado durante el mes de febrero un aumento de sus ventas a extranjeros que superan el 30% respecto a 2019, antes de la pandemia, ya que si la comparación se hace en relación al mismo mes de 2022 ese porcentaje es superior.

La facturación a ciudadanos procedentes de otros países se ha disparado durante este inicio de 2023, lo que se señala como un reflejo de que la campaña turística muestra una mayor desestacionalización, con un volumen creciente de plazas de avión para viajar a la isla, pero también como la demostración de que la oferta hotelera que se ha desarrollado durante los últimos años en Palma, con establecimientos de máxima categoría abiertos todo el año, está consolidada.

No se oculta que el panorama invernal también presenta claroscuros, ya que desde el pequeño comercio se advierte de que este crecimiento en las ventas a extranjeros durante el mes de febrero se ha visto acompañado también de una reducción en las compras realizadas por la clientela nacional, según coinciden en indicar el presidente de la patronal Afedeco, Toni Gayà, y su homólogo en la asociación de comerciantes de Jaume II, Pedro Mesquida. «El frío llegó a Mallorca demasiado tarde», lamenta el segundo.

Todos los representantes empresariales consultados admiten que, si nos referimos exclusivamente a las ventas a extranjeros, éstas se han activado antes y con más fuerza que otros años.

Esta misma apreciación la realiza el presidente de Restauración-CAEB, Alfonso Robledo, que añade un elemento adicional: la facturación en los establecimientos de su sector que muestran un nivel de calidad elevado se ha visto reforzada no solo por la llegada de turistas en pleno invierno, sino también por un número creciente de personas de otros países que han adquirido una residencia estable en Mallorca, cuyo poder adquisitivo está haciendo que se hayan convertido en clientes habituales de algunos bares y restaurantes, pero que además se caracterizan por el elevado gasto que realizan.

Subida en temporada baja

Robledo pone en valor el fuerte incremento que se está dando en la facturación de los establecimientos que resultan atractivos para este tipo de clientela, cuya importancia se multiplica debido a que se produce durante los meses de menor actividad económica en la isla.

Esta última apreciación es respaldada desde las grandes empresas comerciales, desde las que se subraya que no se trata solo de que haya más consumidores, sino que además el importe medio de sus compras suele ser superior al de la clientela nacional. Eso explica que desde los grandes establecimientos situados en zonas frecuentadas por extranjeros, como el centro de Palma, se apunte ese incremento en la facturación superior al 30% respecto a febrero de 2019.

Esta subida se sustenta además la creciente presencia de visitantes de nacionalidades que no son las ‘clásicas’ de alemanes y británicos.

Al elevado poder adquisitivo de los germanos se están sumando ahora un número al alza de suecos y suizos, a los que hay que añadir, en menor medida, el de los daneses, todos ellos caracterizados por la elevada cuantía media de sus compras. También se destaca el caso de los visitantes del Reino Unido, aunque se reconoce que el gasto medio que éstos realizan es inferior al de las nacionalidades antes señaladas.

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