La fortaleza con la que el sector turístico ha salido de la pandemia está dando alas al crecimiento de la economía balear, según se puso ayer de relieve desde BBVA Research. El director territorial de esta entidad financiera, David Conde, y el economista jefe del citado organismo, Miguel Cardoso, subrayaron que el incremento previsto para este año en el archipiélago es de un 3,1%, duplicando el estimado para el conjunto de España, del 1,4%. Eso se suma a la situación que ya se vivió en 2022, ejercicio que se ha cerrado con un alza del 10,6% en el caso de la economía balear, frente al 5,5% de la estatal. No será hasta 2024, según BBVA Research, cuando ambas tasas se sitúen en niveles similares, con un 3,2% en el caso de las islas y un 3,4% como media española.

La fortaleza con la que el archipiélago ha salido de la pandemia no tiene parangón en el resto del país, aunque es también la economía que sufrió el mayor desplome en 2020. De este modo, se señala que Balears se ha convertido en la única autonomía que acumula dos años consecutivos con crecimientos superiores al 10%.

Estas previsiones alcanzan también al empleo, al considerar que entre 2022 y 2024 se crearán 39.000 nuevos puestos de trabajo en las islas.

Un aspecto señalado por Cardoso es que durante la segunda mitad del pasado año comenzó a apreciarse una desaceleración, coincidiendo con la guerra de Ucrania y la fuerte inflación, que se prevé que se mantenga durante el presente ejercicio, aunque se vaticina también que será de corta duración.

Esta pérdida de velocidad durante el tramo final de 2022 se ha detectado igualmente en la venta de viviendas, especialmente en el caso de las adquisiciones realizadas por extranjeros.

Factores favorables

Miguel Cardoso destacó que entre los aspectos positivos que pueden favorecer el crecimiento de la economía está la rebaja que se está detectando en el precio de los combustibles, junto a una normalización de las cadenas de producción y de la llegada de suministros.

En este marco, dio una especial relevancia al saneamiento que se ha registrado en las cuentas de familias y empresas de Balears, con un recorte en sus niveles de endeudamiento que va a hacer más soportable el aumento en los tipos de interés, a lo que se suma un crecimiento del ahorro, factor este último que ayudará a sostener el consumo y la inversión.

También se destacó la aceleración que se espera en la ejecución de los proyectos financiados con fondos europeos.

Riesgos

Sin embargo, no ocultó la existencia de riesgos. Aunque se aplaudió la mejora en la calidad de los establecimientos turísticos que se ha registrado durante los últimos años en las islas, advirtió del peligro de pérdida de competitividad derivado de una subida de sus precios, aunque se matizó que el crecimiento de los mismos que se ha dado entre 2019 y 2022 ha sido en Balears inferior al de otros destinos competidores. Se añadió el riesgo de que el deseo por viajar, que ha sido muy intenso en Europa tras salir de la pandemia, se comience a agotar.

Como se ha indicado, se pronosticó que la desaceleración que se observa en la economía de las islas será breve, pasando del crecimiento del 3,1% estimado para este año a un 3,2% para 2024, con un impulso a medida que vayan desapareciendo las incertidumbres que existen actualmente.