Mallorca

Francina Armengol admite que la vivienda pública «no es suficiente» en Baleares

La presidenta del Govern asegura que «solo si seguimos nosotros» se seguirán construyendo en las islas

Martí March y Francina Armengol, ayer en Pollença.

Martí March y Francina Armengol, ayer en Pollença. / PSIB

Guillem Porcel

Guillem Porcel

La presidenta del Govern y candidata del PSIB-PSOE, Francina Armengol, aseguró ayer que quiere «conquistar» el derecho a una vivienda «para todos y todas»: «Es un derecho de la ciudadanía y estas dos legislaturas hemos trabajado como nunca. Se ha invertido en creación de vivienda pública y, aunque no es suficiente, solo si seguimos nosotros se seguirán haciendo en Baleares». Recordó además que en la legislatura de 2011-2014, cuando gobernaba el presidente del PP José Ramón Bauzá no se impulsó la construcción de ninguna promoción nueva por parte del IBAVI. La socialista participó en la presentación oficial de Martí March, actual conseller de Educación, como candidato a la alcaldía de Pollença.

Las islas viven en estos momentos una situación de emergencia habitacional con precios desorbitados y ya se ha convertido en la principal preocupación de los ciudadanos de Balears. La socialista asegura que «sé que hay muchas dificultades, todo está terriblemente en el aire» y carga contra los que creen que la vivienda es un bien especulativo «para ganar dinero y punto».

La líder del Ejecutivo autonómico manifiesta que el PSIB es el único partido que tiene un proyecto de país para las islas y para Mallorca: «Hemos gobernado ocho años con rigor, porque solo aquellos que no hacen nada no se equivocan». En este sentido expresa que ha sido una legislatura «tremenda» en la que ninguna persona del Govern olvidará lo que ha significado la pandemia: «Hemos hecho posible que en un momento de crisis económica hubiera protección, así que podemos decir con orgullo que pese a haber sido la economía más tocada hemos tenido menos letalidad que ninguna otra comunidad».

Reivindica que «cada vida vale muchísimo, por muy mayor que sea la persona», en una alusión directa a las miles de muertes de personas mayores en las residencias de la Comunidad de Madrid, y pone el foco en que Baleares lidera el crecimiento económico en España: «Somos el Govern de la paz social porque, si os fijáis, donde gobierna la derecha es donde está saliendo la gente a reclamar una sanidad pública y más dignidad para los sanitarios, especialmente en Madrid». Así, califica de «histórico» el acuerdo con Atención Primaria que permitió desconvocar la huelga anunciada por los sindicatos.

Como ya hizo en su intervención del sábado en Marratxí, la socialista volvió a ensalzar el convenio de hostelería firmado la semana pasada entre las patronales y los sindicatos: «Apostamos por políticas útiles para la gente como subir el salario mínimo, aprobar nuevos convenios para la hostelería y las trabajadoras de las residencias privadas o subir las pensiones».

Sobre la anunciada salida de Martí March, la socialista incidió en que será el mejor candidato para Pollença y expresó emocionada que «yo pierdo a una persona maravillosa en mi Govern, pero lo gana toda Pollença»

En esta línea también destacó que «hemos transformado Baleares a mejor» durante estos ocho años en los que ha gobernado el Pacto, y recordó una anécdota de los primeros días: «Si hay un momento que merece la pena recordar es la primera reunión de la comunidad educativa en el Consolat en 2015, cuando volvió la paz social a las aulas, y eso fue gracias a March».