Dos policías de Palma denuncian al fiscal del caso Cursach

Por acusarles de acudir gratis al gimnasio Megasport cuando ellos pagaban la cuota mensual

El fiscal que pidió perdón a los acusados del caso Cursach

El fiscal que pidió perdón a los acusados del caso Cursach / B.Ramon

Redacción

Dos policías locales de Palma, que denunciaron los episodios de corrupción, han presentado una denuncia contra el fiscal del juicio del caso Cursach, Tomás Herranz, al que acusan de haber mentido a propósito sobre ellos, al asegurar que se beneficiaban de un pase gratuito para acudir al gimnasio Megasport, propiedad del empresario, cuando ello no es cierto. Demuestran la falsedad a través de un informe elaborado por la Guardia Civil, que fue mencionado por el fiscal en su informe, pero que no lo aportó como prueba en el juicio, que señala la cantidad exacta que abonaron durante el tiempo que entrenaron en esta instalación deportiva.

Esta denuncia se ha presentado ante la fiscalía General del Estado. Se acusa a Tomás Herranz, quien rompió a llorar y pidió perdón a todos los acusados que fueron juzgados en el caso Cursach, de los delitos de injurias y calumnias. Le acusan, además de mentir sobre los pases gratuitos al gimnasio, de haber insinuado en su informe que uno de estos dos policías mantenía una relación sentimental con el fiscal Subirán, cuando se trata de una persona que está casada y tiene tres hijos, dos de ellos menores.

También denuncian que el fiscal Herranz insinuara en su exposición final que el juez Penalva había dado un trato de favor a estos dos policías, al no imputarles por un delito de cohecho por recibir pases gratuitos al gimnasio. Un cohecho que no se habría cometido porque la investigación de la Guardia Civil acredita el dinero que pagaron por acudir al gimnasio, a diferencia de varios de los agentes que estaban siendo juzgados, que sí disfrutaban de este acceso gratuito. 

Estos dos policías fueron los que hace años denunciaron el negocio de Cursach en la Platja de Palma, al incumplir una orden que le prohibía poner música. Los agentes presenciaron como se utilizaba la música de otro local de Cursach, situado junto al Megapark, para dar sonido a la abadía. El fiscal, en su informe, criticó esta actuación policial y según los policías locales de Palma lo hizo con el único objetivo de desacreditar su declaración como testigos. También cuestionan que el fiscal no presentara al tribunal las pruebas que ellos aportaron, como por ejemplo una grabación en la que se proponía la hora de una inspección a la discoteca Titos.