Govern y patronal diseñan un sistema para corregir los fallos sanitarios en los restaurantes de Baleares

Han creado una aplicación para que las empresas detecten los errores que cometen y los corrijan

Los negocios de restauración podrán autocontrolar si cumplen la normativa.

Los negocios de restauración podrán autocontrolar si cumplen la normativa. / BERNARDO ARZAYUS

Fernando Guijarro

Fernando Guijarro

«El problema de buena parte de la restauración balear radica más en la inconsciencia que en la imprudencia», afirma la jefa del servicio de Seguridad Alimentaria del Govern, Margalida Buades, Y se trata de algo con lo que el presidente de la asociación de este sector vinculada a CAEB, Alfonso Robledo , está de acuerdo: aunque hay una minoría que se despreocupa de respetar la normativa sanitaria, la mayoría de los incumplimientos está relacionada con el desconocimiento de la misma.

En este sentido, se señala el elevado porcentaje de negocios de tipo familiar existente en el sector, abiertos por personas que buscan una salida para disponer de unos ingresos pero que no han tenido una formación adecuada para el desarrollo de esta actividad y que desconocen en toda su extensión las medidas sanitarias que es necesario aplicar. En este sentido, Buades apunta que una de las reacciones más habituales cuando un inspector detecta una deficiencia grave es la de alegar que en ese establecimiento nunca se ha registrado ningún problema, sin ser consciente del riesgo que se ha corrido.

Por ello, Alfonso Robledo pone en valor la iniciativa que desde su patronal y la conselleria de Salud se ha llevado a cabo durante los últimos años para paliar este problema, y reconoce el excelente trabajo que se ha desarrollado desde este departamento autonómico.

Autocontrol

El resultado es que en pocas semanas se presentará públicamente una aplicación creada para que, de forma sencilla, los empresarios de la restauración balear puedan hacer un test que les permita descubrir qué cosas están haciendo bien y en cuáles se están cometiendo fallos, con el fin de que puedan solventarlos.

Una vez se ha completado el proceso y se han corregido las deficiencias, una empresa certificadora podrá comprobar que el establecimiento ha pasado a cumplir todas las condiciones que se le exigen.

La jefa de Seguridad Alimentaria y el presidente de Restauración-CAEB subrayan la importancia que van a tener estos autocontroles, especialmente debido a que, como admite la primera, el personal de inspección de que dispone es claramente insuficiente como para poder mantener una vigilancia relevante sobre el sector. En este sentido, se reconoce que cada año solo se puede revisar la situación de un 15% de los establecimientos, lo que supone que algunos pueden ver como pasan varios años sin que se revise su situación.

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