Devolver las competencias en sanidad, la primera propuesta de Guasp al frente de Ciudadanos

La nueva portavoz nacional de Cs y coordinadora del partido en Balears, Patricia Guasp, ofreció ayer su primera rueda de prensa como líder del partido tras ganar las primarias a Edmundo Bal e hizo pública su primera propuesta de cara a las elecciones autonómicas y municipales de mayo: centralizar las competencias en Sanidad y que dejen de ser las Comunidades Autónomas quienes lo gestionen. Afirma que «todos conocemos la triste realidad» de la Atención Primaria en regiones como la Comunidad de Madrid, Balears, Andalucía o Cataluña y denuncia que los españoles tienen un «problema grave» con los servicios públicos que ofrece la sanidad española.

En el debate de las primarias antes de la votación final Guasp ya manifestó este posicionamiento a la vez que reivindicaba la necesidad de otorgar más autonomía y poder a los territorios. Explicó que la centralización de las competencias busca que «todos los ciudadanos tengan las mismas condiciones y servicios», una cuestión que desde su punto de vista debería gestionarse directamente desde Madrid. La propuesta provocó el reproche de Marcos Morales, el líder de la tercera candidatura que consiguió los avales, porque «ser liberal es lo contrario al centralismo; es estar en contra de que Madrid lo decida todo». Y añadió: «Madrid ya nos dijo que había que pactar con el PP en Murcia y ahora tenemos el mayor caso de transfuguismo».

La dirigente mallorquina volvió a reiterar que el partido ha apostado por «nuevas caras y nuevo talento» para poder estar «a la altura de todos los españoles». En este sentido, asegura que es un partido «renovado» que se opone al bipartidismo «que no ha sabido afrontar» los retos del siglo XXI: «Somos el único partido de centro liberal y la alternativa en este contexto polarizado».

Además de la centralización de las competencias en Sanidad, Guasp reclama una reforma del sistema de pensiones porque está «quebrado» y asegura que no está garantizado el futuro de las pensiones: «Me resigno a pensar que los jóvenes no tienen futuro, proponemos un pacto intergeneracional para garantizar las pensiones y el Estado del bienestar».

También quiso acordarse de los partidos que gobiernan en Balears, a los que llamó «el Pacto de retroceso del PSIB con nacionalistas y populistas», una calificación que ha usado en reiteradas ocasiones en el Parlament balear, y asegura que dada su experiencia en Balears está «acostumbrada a los retos».

Manifiesta que es «muy consciente» de la realidad y de la situación que vive la formación ‘naranja’ y vuelve a repetir que fue un «gran error» anunciar que el socio preferente de Cs era el PP: «A partir de mayo no habrá ninguna consigna para que pacten como si hubo en 2019, confiamos en los candidatos y líderes territoriales». Así, destaca que la única línea roja será el programa electoral.

Sobre Inés Arrimadas, que ha dado un paso al lado, defiende que debe continuar como portavoz en el Congreso ya que es «una referente»: «Esto no se ha cuestionado durante la refundación». Pero reconoce las grandes diferencias con Edmundo Bal, su oponente: «Le trasladé la importancia de sumar, hay que unir pero todo pasa por aceptar los resultados».

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