En contra

«Las personas son más peligrosas para Tramuntana que las cabras»

Lluís Vallcaneras (Palma, 1958) es químico con cuatro décadas de experiencia en la enseñanza, y uno de los mayores conocedores de la Tramuntana con una treintena de libros bajo su firma. Presidió la federación de Montañismo. Acaba de publicar ‘El llibre de la neu’, escrito junto a Bartomeu Bonet y Miquel Salamanca

Lluís Vallcaneras

Lluís Vallcaneras / Manu Mielniezuk

Matías Vallés

Matías Vallés

Para que se haga cargo del tipo de entrevista: «¿También nos quedaremos sin nieve?»

Todo apunta a que sí. En 2022 no ha nevado ni una vez, y solo en una ocasión el año pasado. La nieve se ha hecho esporádica, hasta los años ochenta encontramos cantidad de fotos sin dificultad para ilustrar El llibre de la neu.

¿Y nos quedaremos sin Serra de Tramuntana?

¿En qué aspecto? No me pillarás. Como zona natural, necesita una inversión potente, y les cuesta gastar en estos asuntos. En un futuro se han de regular y limitar las visitas, pero no sé cómo.

¿El ser humano acabará con la Tramuntana?

El principal enemigo de la Serra son las personas. Son más peligrosas que las cabras, que ya es decir. Somos demasiados, no es solo un problema de gamberrismo. Sa Fosca era una aventura y ahora está llena de gente.

En ‘El llibre de la neu’ se ven paisajes alpinos.

Fotografiados sin salir de Mallorca. La nieve es muy importante para la isla, la idea de El llibre de la neu surgió cuando Bartomeu Bonet me dijo que había descubierto una casa de nieve no catalogada. Quisimos escribir un libro que abarcara todo el fenómeno, para lo cual necesitábamos al meteorólogo Miquel Salamanca. Hemos visitado en julio y agosto las 52 casas identificadas, con un calor asfixiante.

Nieva una vez al año y enloquecemos.

Y si fueran veinte, se colapsarían veinte veces las carreteras de montaña, haciendo literalmente imposible el paso de una ambulancia o un coche de bomberos. El paisaje mallorquín gana mucho con el valor añadido de la nieve, con la imagen del mar al fondo.

¿Hay una nieve a la mallorquina?

La nieve en polvo que no moja se ve pocas veces, porque las entradas de frío disminuyen progresivamente. Es más frecuente la de primavera, más húmeda.

¿Barranquismo, peligro de muerte?

No tiene nada que ver. Puede que tengas todos los factores controlados, y algo se te escapa, le pasa al más pintado. Los dos fallecidos en Pollença controlaban, y tuvieron mala suerte. Has de haberlo vivido, como me pasó a mí, para saber el poder de arrastre del agua.

¿Qué es una casa de nieve?

Es un agujero natural o artificial en la tierra, y se aprovechaba para meter la nieve, que se concentra empujándola hasta que adquiere un grosor y consistencia de láminas de hielo. Están documentadas desde el siglo XVI en Sóller, y la última funcionó en Escorca hasta los años veinte del siglo pasado.

«Contrabando de nieve», no dejamos pasar una.

Es difícil de probar, pero hay casas de nieve que no figuran en ningún catálogo, y que no son visibles pese a estar cerca de otras conocidas. La nieve estaba muy regulada, y por la ubicación y ausencia de referencias parece que en todo hacemos estraperlo.

¿La nieve llegaba desde Barcelona?

En más de una ocasión, cuando faltaba, la nieve era transportada a Mallorca en veleros. Llegaba una cuarta parte de lo que se embarcaba en Barcelona, y a precios muy caros. Si no la vendías de inmediato, perdías todo el dinero.

Al que le moleste el ruido de motos en la Tramuntana, que venga a vivir a las Avenidas de Palma.

Son dos cosas diferentes. El ruido de motos sobra en la Serra. La gente que va a vivir allí buscando tranquilidad y silencio, se encuentra con circuitos de carreras muy organizadas y difíciles de atajar. ¿Por qué se ha de soportar eso en un paraje natural?

Porque en cuanto establecemos un privilegio, lo absorben los compradores extranjeros.

Proteger la Serra sirve para revalorizarla, pero no habría contradicción si no tuviéramos tanta facilidad para desprendernos de nuestro territorio. Donde alguien ha comprado, alguien ha vendido.

¿Es criminal promocionar la Tramuntana?

Entonces yo estaría en la cárcel. Hay que hablar en positivo, indicarle a la gente dónde puede ir en vez de martirizarla con dónde no puede. Y la desestacionalización turística no es una buena noticia para la naturaleza, que pierde su etapa de regeneración.

¿La sequía está afectando a la Tramuntana?

Fuentes que manaban todo el año se secan en verano. Hasta el carrizo se muere, y hay incluso pinos que no aguantan. La encina lo evita perdiendo las hojas.

¿Por qué volverá mañana a la Tramuntana?

Mañana mismo, y porque es mi vida, donde me encuentro mejor. No tengo sentido sin la Serra. Hay sitios donde he estado cincuenta mil veces, y los veo en cada ocasión de forma diferente. Vuelvo renovado, y los alumnos notan el lunes si he podido visitar la Tramuntana. Sin embargo, nunca he querido vivir fuera de Palma.

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