Una de cada cinco mujeres trabajadoras de Baleares ha sufrido algún episodio de acoso laboral en el centro donde trabaja. Así lo denunció ayer el sindicato Comisiones Obreras, que mantiene que esta situación de acoso en el trabajo sigue siendo un delito oculto, porque las víctimas no se atreven a denunciar por temor a ser despedidas, o simplemente porque temen que nadie las crea. Dicho sindicato ha creado en Balears un observatorio para visualizar y cuantificar los casos de violencia de género en el trabajo, así como para buscar las medidas de prevención y sobre todo de concienciación de lo que representa este problema.

Los sindicatos CC OO y UGT están uniendo esfuerzos en su lucha contra la violencia de género, cuyo día internacional para la eliminación de esta lacra social se celebra hoy.

Francisca Garí, responsable de las políticas de igualdad de UGT presentó ayer, con motivo del 25N, el informe que detalla las cifras de la violencia de género que sufren las mujeres. Balears continúa encabezando la lista nacional del número de víctimas en relación con el número de habitantes. Las islas sufrieron 103 casos de agresión a mujeres por cada 100.000 habitantes, una cifra que casi dobla la media nacional.

Garí salió ayer en defensa de la denominada ley «solo sí es sí» y alabó el trabajo que ha realizado la ministra Irene Montero. Sin entrar en la polémica que ha supuesto la liberación de agresores sexuales ya condenados, al verse beneficiados con esta ley, la representante sindical insistió en que esta norma permite que una mujer ya no tenga que justificar cuando se niega a mantener una relación sexual. A juicio de la representante sindical, la sociedad balear está impregnada por una situación de machismo generalizado. Es una realidad que, según Garí, solo se podrá superar a través de la educación de los más jóvenes, por lo que los resultados no se verán hasta dentro de unos años. UGT, al igual que CC OO, denunció el problema que representa la violencia sexual dentro del ámbito laboral y detalló que todavía hay muchas empresas que carecen de un plan específico para evitar este tipo de situaciones. El informe de UGT señala que el número de denuncias por acoso laboral contra las trabajadoras sigue siendo muy bajo y, por tanto, no refleja la situación real de este problema social. El sindicato denuncia, además, la escasa sensibilidad social que existe sobre este problema tan grave.

Con motivo del 25N, UGT ha impulsado una campaña bajo el título “la violencia machista tiene muchos nombres, solo hay que saber identificarlos”. El sindicato se comprometió a continuar siempre al lado de las víctimas y solicitó que los procesos judiciales que se inician cuando una mujer denuncia a su agresor sean más rápidos. Los sindicatos se concentrarán hoy en Palma para exigir la desaparición de esa lacra social.