La llegada a Baleares durante los pasados meses de julio y agosto de una treintena de inspectores de Trabajo procedentes de la península se ha saldado con la mejora directa de las condiciones laborales de 1.315 trabajadores de las islas y con propuestas de multas a empresas por valor de 576.000 euros, según los datos facilitados por el conseller de Trabajo, Iago Negueruela.
En concreto, este aumento de la vigilancia gracias al acuerdo alcanzado entre el Govern y el ministerio de Trabajo ha permitido transformar 340 contratos a tiempo parcial para aumentar la duración de la jornada, al considerar que se estaba haciendo trabajar al asalariado más tiempo del que se había hecho constar.
También se ha obligado a transformar 395 contratos temporales en indefinidos, y ello a pesar de las limitaciones que la reforma laboral ha implantado en esta materia, lo que según Iago Negueruela demuestra que los servicios de Inspección son cada vez más eficaces.
Jornadas excesivas
Los controles realizados han permitido detectar fraude en la jornada laboral de 487 personas, a las que se obligaba a realizar un exceso de horas durante sus jornadas.
Finalmente, se han registrado 93 casos en los que los trabajadores no habían sido dados de alta en la Seguridad Social y se les obligaba a permanecer en la economía sumergida, un tipo de infracción que el conseller calificó de especialmente grave.
El resultado de todo este trabajo ha sido la apertura de 234 procedimientos sancionadores a las empresas infractoras, con propuestas de multas por un valor global de 576.000 millones de euros.
De este importe, 381.048 euros corresponden a las sanciones vinculadas a la economía irregular, 74.257 a la obstrucción de la labor inspectora al pretender dificultar el trabajo de estos funcionarios, 113.318 se explican por el fraude detectado en aspectos como la temporalidad de los contratos y el tiempo de trabajo, y 7.510 euros se justifican por las faltas de comunicación a la Seguridad Social.
El conseller ha puesto de relieve que estas cifras reflejan la efectividad de estos controles especiales vinculados a la llegada de inspectores de la península, dado que se han detectado casos de fraude pese al descenso que las islas están mostrando en materia de contratación temporal tras la reforma laboral (su tasa ha pasado del 36% de 2015 al 10,7% en 2022 en Baleares, porcentaje este último que ya mejora el 18,4% estatal), al igual que la rebaja que se está consiguiendo en los contratos a tiempo parcial, que en este caso han pasado de suponer el 18,7% durante el tercer trimestre de 2015 al 11,8% de las mismas fechas de este año. En relación a este último punto, Iago Negueruela ha recordado que el objetivo que se había marcado el Govern era reducir esta tasa de parcialidad al 12%.
Además, ha señalado que aunque 1.315 asalariados han visto mejorada su situación de forma directa por esa vigilancia, se estima que de forma inducida esa cifra se eleva con 3.488 más, hasta alcanzar una cifra total de 4.803 personas.
Aumento de los inspectores destinados a las islas
El conseller de Trabajo ha añadido que prolongar más allá de julio y agosto los controles que se desarrollan en las islas por parte de inspectores llegados desde otras provincias no es posible, ya que supone reducir temporalmente esa plantilla en otras zonas del país, pese a las reivindicaciones que hacen los sindicatos. Sin embargo, se ha indicado que la cifra estable de estos funcionarios en Balears es de 63, y que existe el compromiso de la ministra Yolanda Díaz de incrementarla.
