El Gobierno ha aprobado hoy, en Consejo de Ministros, un conjunto de medidas para facilitar el pago de la hipoteca a más de un millón de hogares ante el incremento de los tipos de interés. Estas medidas están dirigidas a las familias más afectadas por la subida del Euríbor, el tipo de interés de referencia de las hipotecas a tipo variable. Más de un millón de hogares podrá beneficiarse de esta protección, un tercio de los que tienen hipotecas a tipo variable, según ha señalado la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño.

Ciudadanos con rentas inferiores a los 25.200 euros al año

Se reduce el tipo de interés aplicable durante los 5 años de carencia en el pago del principal de la hipoteca, pasando del Euribor más 0,25% al Euribor menos 0,10%. Se introduce la posibilidad de que las familias soliciten la reestructuración de la deuda en más de una ocasión. Se duplica hasta los 24 meses el plazo para solicitar la dación en pago de la vivienda habitual, y se amplía de 6 a 12 meses el plazo para solicitar el alquiler social en la propia vivienda a la entidad financiera, por un importe máximo del 3% de su valor, por parte de las personas en situación de vulnerabilidad que estén sometidas a una situación de desahucio de su vivienda habitual.

Hogares vulnerables que no hayan experimentado un aumento del 50% de la carga hipotecaria

También podrán acogerse al Código, en este caso con una carencia en el pago del principal de 2 años, un tipo de interés menor durante ese periodo y la posibilidad de alargar el plazo de la hipoteca hasta 7 años.

La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros Eduardo Parra - Europa Press

Familias con rentas inferiores a 29.400 euros

La protección también se extiende a las familias de clase media que se encuentren en riesgo de vulnerabilidad como consecuencia del aumento rápido de la carga hipotecaria: el nuevo código de buenas prácticas será aplicable a los hogares con renta inferior a 3,5 veces el IPREM -unos 29.400 euros anuales- que tengan que hacer frente a una cuota hipotecaria superior al 30% de su renta y que hayan experimentado un incremento de esta carga hipotecaria de al menos el 20%. Las entidades financieras deberán ofrecer la posibilidad de congelar la cuota durante 12 meses, una reducción del tipo de interés aplicable al principal que se aplace y un alargamiento del plazo del préstamo de hasta 7 años.

Facilitar de conversión de las hipotecas de tipo variable a fijo

Entre las iniciativas aprobadas, se incluyen otras dirigidas a reducir aún más todos los costes de conversión de las hipotecas de tipo variable a tipo fijo y a eliminar las comisiones por amortización anticipada y por conversión durante 2023.