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Rutas contra el olvido por la Mallorca de la Guerra Civil

Maria Àngels Ferragut propone nueve itinerarios a pie por la isla para descubrir las historias de represión que ocultan edificios y construcciones en un libro que acaba de publicar

Maria Àngels Ferragut posa con su libro en Consell. Pere Joan Oliver.

«Aquí no encontrarás alegría, pero al menos encontrarás verdad». Son palabras de Maria Àngels Ferragut, autora de una guia de hechos, lugares y personas unidas por un vínculo: la Guerra Civil y la represión franquista en Mallorca. Propone nueve rutas a pie por la isla para descubrir la historia que se oculta en fábricas, plazas, refugios y cementerios. O la que explican placas, adoquines y baterías antiaéreas. 

‘Rutes de la Guerra Civil i la Repressió a Mallorca’, editado por Menjavents, plantea un itinerario en Inca, Porreres, Manacor y Port de Sóller; dos en Pollença y otros tres dedicados al desembarco republicano de Bayo en el Llevant en agosto de 1936. Cada uno de ellos incluye un punto de inicio de la ruta, distancia del recorrido, duración, una descripción del itinerario respaldada con mapas y fotografías, y por supuesto una relación de los lugares de interés, elementos que en muchos casos escapan del radar de los ciudadanos y que de un modo u otro entroncan con la Guerra Civil. 

Personas y escenarios

«Es una invitación a ver y a reflexionar», explica Ferragut, licenciada en Historia y Geografía que trabaja como educadora ambiental. Esta guia germinó en el postgrado de Políticas de Investigación en Justicia de Transición y Memoria Democrática que se impartió en la UIB durante el curso 2020/21. 

«Siempre me ha gustado la temática de la Guerra Civil y por otro lado estoy muy acostumbrada a hacer salidas al campo, así que me decidí a hacer este mapa de rutas. Para mí es muy importante hacer divulgación de lo que sucedió durante aquellos años porque hubo décadas de silencio», relata.

La guia es una reivindicación de personas represaliadas y escenarios olvidados porque en muchos casos no hay nada que recuerde su pasado. Ferragut ha acumulado un ingente trabajo de documentación y muchas horas consultando bibliografía. 

El libro propone nueve rutas por Mallorca. Pere Joan Oliver.

«Lo he hecho de la manera que a mí me hubiera gustado que me lo hubieran explicado. Dando valor a la investigación previa de antropólogos, historiadores, juristas y arqueólogos. También he utilizado memorias y autobriografías, entrevistas y testimonios escritos de personas que sufrieron la represión en primera persona o de sus familiares. Como por ejemplo las Cartas de la Memoria que se pueden consultar en la web del departamento de Memoria Democrática del Govern. El libro es una combinación de investigaciones de expertos y testimonios en primera persona», afirma.

Fábricas con historia

Y por supuesto mucho trabajo de campo. Con la información recopilada, Ferragut informa y contextualiza. Por ejemplo, a lo largo de los 2,5 kilómetros de la ruta de Inca se levantan las fábricas Ramis y Melis, que durante el conflicto se reconvirtieron para confeccionar ropa militar para los soldados del bando nacional. También propone visitar uno de los refugios antiaéreos construidos en la localidad para que la población se protegiera de los bombardeos. O el convento de Sant Domingo, que durante el conflicto bélico fue un centro de reclusión en el que los presos republicanos sufrieron torturas.

«Conocer los acontecimientos en el mismo lugar en el que se produjeron no dejará indiferente», anima Ferragut. Con la guia en la mano, el lector-senderista conoce el contexto y la historia que esconde un edificio o construcción determinada y que en la mayoría de los casos no incluyen placas o carteles explicativos

«Hay pocos elementos señalizados. Memoria Democrática hace mucho trabajo, pero se ha empezado de cero y todavía queda mucho por hacer a la hora de reivindicar este patrimonio. Propongo nueve rutas, pero se podría hacer al menos una en cada municipio. ¿Hay algún pueblo en Mallorca en el que la Guerra Civil no dejara huella?», se pregunta Ferragut. 

A veces los itinerarios contienen puntos de interés como nidos de ametralladoras que recuerdan claramente a la Guerra Civil. En otras ocasiones son calles o plazas que habitualmente no se asocian a aquellos años, como la de Georges Bernanos, en el Port de Sóller, que recuerda a un escritor de derechas que abandonó Mallorca en 1937 y denunció la represión de aquel primer año de conflicto.

Palma se ha quedado fuera del mapa de itinerarios de Ferragut porque «el trabajo habría sido colosal», dice la autora. Serían paradas obligatorias el cine Augusta (antigua cárcel de Can Mir), el domicilio del alcalde asesinado Emili Darder o el solar de la Casa del Poble

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