Mallorca pierde agua. No es una novedad que las fugas de las tuberías públicas es uno de los grandes desafíos de las administraciones de la isla. Y es que ante la situación de prealerta de sequía en la que se encuentra toda la isla, dichos problemas se convierten en una amenaza real y han provocado este pasado verano que municipios hayan tenido que sufrir restricciones.
El total de agua que pierde Mallorca podría abastecer a unos 560.000 habitantes en un año. O lo que es lo mismo, suministrar agua durante 12 meses a los habitantes de Palma, Manacor e Inca.
Según los últimos datos del INE, el consumo medio en España por persona está en torno a los 133 litros de agua al día. Por comunidades autónomas, Balears estaría por debajo según el organismo. Al año, ese consumo medio es de 48.545 litros, que equivaldrían a 48,5 metros cúbicos o toneladas.
Según los últimos datos de la conselleria de Medio Ambiente referentes a 2021, Mallorca pierde 27,177 hectómetros cúbicos, es decir, 27.177.00 metros cúbicos, esto es, más de 27 millones de toneladas de agua, una cifra similar a la de 2020. El departamento que dirige Miquel Mir calcula que el 27% del agua potable se pierde por la red de distribución, y llega en algunos municipios a superar el 60%. Para hacerse una idea, con 27 millones de toneladas de agua se podría llenar dos veces al año el embalse del Gorg Blau.
Los escapes de agua se deben principalmente al mal estado de las redes de tuberías municipales. El problema no es sólo el desperdicio de un bien tan escaso como el agua, sino también el impacto en los recursos económicos, puesto que se ha de recurrir a las desaladoras para garantizar el abastecimiento.
La reparación y modernización de las instalaciones debería ser una prioridad para los municipios con el objeto de poder poner fin a esta sangría con el agua, una situación que lleva años repitiéndose y que pone de manifiesto el poco interés que ha habido en las administraciones municipales para solucionar una cuestión que es poco vistosa y cuya reparación puede causar molestias a los vecinos.
Si bien en 2017 se excluyeron de la ecotasa 50 proyectos de reparación de fugas de agua en las redes de suministro de 22 municipios, este año se han aprobado con el Impuesto de Turismo Sostenible un total de 20 millones para las infraestructuras hidráulicas. Se abrirá una convocatoria pública para que los consistorios se presenten.
Entre los municipios que más agua pierden en Mallorca, en números absolutos cabe mencionar Palma, con más de siete millones de toneladas, que podrían abastecer a unas 145.000 personas en un año; Calvià, con 1,8 millones de toneladas; Alcúdia, 1,6 millones; Manacor, 1,9 millones; Marratxí, un millón, o Santanyí, con 791.000 toneladas perdidas.
Cabe señalar que de los 52 municipios de Mallorca una treintena incumplen el Plan Hidrológico de Balears, que establece no tener pérdidas del 25% en el consumo en 2021.
De cara al futuro, el Plan Hidrológico también apunta que en el año 2027 estas pérdidas no pueden superar el 17% de su caudal. En el caso de que en los próximos seis años no se realice una inversión importante en reparar las redes de abastecimiento de agua, tan sólo dos o tres municipios cumplirán el objetivo del Plan Hidrológico.
