El Parlament aprobó ayer el techo de gasto para elaborar los presupuestos del año que viene, que asciende a casi 6.000 millones, en concreto 5.947 millones de euros. La consellera de Hacienda, Rosario Sánchez, afirmó que se está trabajando en unas cuentas públicas «más sociales y para transformar a Balears». El incremento del presupuesto de este año con respecto al 2022 asciende a 774 millones. Según Sánchez, ello supone un aumento del 15%.

No obstante, desde el PP criticaron la «alegría» a la hora de gastar. El diputado popular Sebastià Sagreras aseguró que «el Govern quiere tirar la casa por la ventana con estos presupuestos para hacerle la campaña a Francina Armengol». Sagreras volvió a reclamar una bajada de impuestos y recordó que Armengol «es la única presidenta socialista que no lo ha hecho».

El Parlament dio el visto bueno al techo de gasto no financiero de 5.947,5 millones de euros con el voto en contra de PP, El Pi y Vox, la abstención de Cs y el voto favorable de Més per Menorca además de los grupos del Pacte.

Rosario Sánchez afirmó que tienen previsto «el ciclo inversor jamás visto en Baleares, sin aumentar la deuda, y ello permitirá iniciar el cambio que necesita el archipiélago». En este sentido indicó que la aportación del Estado supone 3.350 millones, un 25,3% más y lo calificó como el más alto de España.

Josep Melià (El Pi) explicó su voto en contra por el «nivel de endeudamiento similar a 2019 y consideramos necesaria una disminución del IRPF».