El Colegio de Veterinarios de Baleares ha destacado este martes que la vacunación y la vigilancia epidemiológica son las herramientas más eficaces para prevenir la reintroducción de la rabia en la comunidad.

Según han informado con motivo del Día Mundial Contra la Rabia que se conmemora este miércoles, Baleares es una zona libre de rabia en animales terrestres pero no en murciélagos. Por ello, la vacunación es obligatoria en perros y voluntaria en otras especies.

Así los veterinarios han insistido en la necesidad de que todos los propietarios de animales de compañía tomen conciencia de la importancia de la vacunación antirrábica como la mejor y única opción para proteger a sus animales y a las persones convivientes de "una enfermedad que, contrariamente a lo que se piensa, no es tan ajena".

Aunque Baleares es una zona libre de rabia en animales terrestres, "tanto la proximidad con los países del Magreb, donde la rabia animal es endémica, como el gran número de movimientos de animales y personas, muchas veces sin control, son factores que aconsejan no bajar la guardia". Además, la rabia también afecta a los quirópteros, de los que se han documentado infecciones a personas y a otros mamíferos. Por eso, cualquier persona mordida por un murciélago debe ser vacunada necesariamente contra la enfermedad.

Según ha explicado el presidente del Colegio de Veterinarios de la comunidad, Ramón García, el riesgo actual de reintroducción del virus en Baleares viene "determinado por dos supuestos: la posible entrada ilegal o no controlada de animales portadores y la llegada de personas de zonas endémicas que hayan sido mordidas por algún animal y que puedan estar infectadas sin saberlo".