BBVA organizó el pasado jueves un foro sobre sostenibilidad, en la sede de la propia entidad, donde intervino la vicepresidenta y CEO del Grupo Iberostar, Sabina Fluxá.

Para el grupo hotelero la palabra sostenibilidad está «bastante manida». Fluxá explicó que prefieren referirse a «responsabilidad» y su visión a largo plazo como empresa familiar es «impulsar y liderar un turismo responsable».

La vicepresidenta desarrolló que desde Iberostar defienden la calidad en el desarrollo turístico. «Defendemos un modelo turístico que encuentra el equilibrio entre la rentabilidad económica y el impacto que dejamos en la sociedad y en el medio ambiente».

«Las empresas que no lo integren en su estrategia de forma honesta y fehaciente se van a acabar quedando fuera. Es un camino de no retorno», añadió Fluxá.

Iberostar puso en marcha en 2017 su movimiento Wave of Change, que se articula en tres palancas: economía circular, consumo responsable de pescado y marisco y salud costera. Fluxá apuntó que el grupo hotelero «se plantea ser libres de residuos en 2025 y lograr la neutralidad de carbono en 2030».

Con esta iniciativa, el Grupo ha implementado mejoras en los hoteles, a destacar la eliminación del plástico de un solo uso en los hoteles, el impulso de la electrificación y, en concreto, que el primer hotel en probar el hidrógeno verde está en Baleares.