La ministra de Educación, Pilar Alegría, mostró este viernes su apoyo a Izan, el niño de Lloseta que sufrió bullying por parte de sus compañeros, así como su «repulsa e indignación» por este caso de acoso. Al ser preguntada por la denuncia del hermano de la víctima a través de las redes sociales, Alegría aseguró que «este caso ha sucedido en una colonia de verano, no en el transcurso del período escolar» y, aunque se ha producido en un colegio, la colonia la gestionaba una empresa privada, quiso precisar antes de intervenir en un acto público en la capital riojana, en calidad de portavoz de la Ejecutiva Federal del PSOE.

Según detalló, el ayuntamiento de Lloseta, como responsable de la gestión de estas colonias, ha puesto en marcha todos los mecanismos y los protocolos, y el consejero de Educación, Martí March, con quien ya ha hablado, también ha puesto a disposición del centro todos los medios de que dispone la Administración autonómica de Balears.

Además, el Ministerio de Educación ha activado el Observatorio de Convivencia Escolar, que estaba «inactivo» desde 2013 y que «el PP nunca lo activó», subrayó Alegría.

Asimismo, explicó que su departamento quiere seguir trabajando en esa línea porque «es absolutamente fundamental que apostemos por mejorar la formación que recibe nuestro profesorado para, sobre todo, atacar en la prevención de este tipo de actitudes que también se dan en los entornos educativos».

A modo de conclusión, la ministra de Educación quiso hacer hincapié en que las cifras de acoso escolar han registrado una bajada en los últimos años, y recordó que el Ministerio de Educación está a disposición de familias y docentes para evitar que se produzcan este tipo de actitudes, con el fin de evitar que vuelvan a suceder casos como el de Izan.

Se interrogará a los monitores para saber si actuaron bien

Para esclarecer el caso, los agentes tienen la intención de interrogar a los monitores presentes aquel día para decidir si se toman acciones contra ellos en caso de que no actuaran correctamente. Empezarán la investigación y tomarán declaración a los implicados, incluida la familia de Izan, para recabar toda la información necesaria con el objetivo de conocer el caso en profundidad. La Guardia Civil se puso en contacto con los afectados para ofrecerles todas las facilidades a la hora de poner el caso en sus manos. Además, ha pedido un informe sobre lo ocurrido en el colegio y está en proceso de investigar el vídeo que se ha hecho viral. Aunque las primeras apreciaciones apuntan a que los niños podían haber hecho lo mismo en ocasiones anteriores y de forma repetida, por lo que no se trataría de un problema puntual.