En la senda de la recuperación económica. Baleares lideró en julio el gasto turístico en España, con un total de 2.806 millones, un 71% más que el año anterior, según los datos publicados por el INE a partir de la encuesta de Egatur. Sin embargo, el dinero que gastaron los visitantes extranjeros en las islas se queda todavía en cifras globales un 3% por debajo de lo invertido en sus vacaciones de 2019. No obstante, con respecto al año previo a la pandemia hay dos datos muy positivos. Baleares iguala el gasto medio por turista antes de la pandemia, 1.234 euros, y aumenta un 10% el gasto medio diario, que ahora alcanza los 187 euros por turista.
Estos datos se han alcanzado gracias a las 14,9 millones de pernoctaciones de los turistas extranjeros en Baleares durante el mes de julio, récord absoluto en España, un 66,5% más que en 2021 y superando en más de dos millones de pernoctaciones a Cataluña, la segunda comunidad con más pernoctaciones, pero todavía un 12% menos que en 2019.
Por comunidades autónomas, el gasto turístico en Baleares representa 1 de cada 4 millones que los visitantes extranjeros gastaron en España, 1,8 puntos porcentuales por delante de Cataluña, 10 puntos porcentuales por delante de Canarias; 11,1 puntos por delante de Andalucía y 11,13 puntos por delante de la Comunidad Valenciana.
Con respecto a 2019 las islas dan un vuelco a la clasificación y desbancan a Cataluña en julio como líder nacional en el gasto turístico de los visitantes extranjeros. Es verdad que Balears cae todavía 0,5 puntos porcentuales, pero el turismo extranjero pierde peso en Cataluña con respecto a 2019, un 3,2% menos.
En datos acumulados durante los siete primeros meses de 2022, los visitantes extranjeros gastaron 8.623 millones de euros en Baleares, un 66% más que el año pasado y un 4% más que en 2019. El 18,1% de todo el gasto turístico extranjero de 2022 se ha realizado en las islas, un 0,4% por debajo de Cataluña y un 2,2% por debajo de Canarias, las comunidades que preceden en Baleares en gasto turístico acumulado.
Con respecto al gasto turístico por nacionalidades, Reino Unido sigue liderando la inversión en el ámbito nacional, seguido de Alemania, Francia, Países Nórdicos e Italia. Con respecto a 2019, la inversión baja en todos los países salvo en Francia, que pasa de 1.063 millones gastados por sus turistas en España en el último año sin covid a los 1.213 invertidos durante el mes de julio de este año.
En cuanto a las llegadas, las islas han logrado recuperar el turismo perdido durante la pandemia provocada por la covid-19, obteniendo un aumento de la rentabilidad gracias al mayor gasto de sus visitantes. Así, las Balears cerraron julio con un total de 2,81 millones de turistas, tanto nacionales como internacionales, tal y como pone de manifiesto la Encuesta de Movimientos Turísticos en Fronteras (FRONTUR).
Según estos datos, por cuarto mes consecutivo las Islas han sido capaces de registrar el mismo número de turistas que se recibían en julio de 2019, antes de la pandemia, mientras que en el acumulado anual, las Baleares cerraron julio con 9,23 millones de turistas en total, lo que supone haber recuperado un 97,3% de los 9,48 millones que llegaron en el mismo mes de 2019.
Del total de 2,81 millones de turistas, la cifra de nacionales llegados a las Islas durante el quinto mes del año fue de 537.091, un 20% más, mientras que la de viajeros extranjeros fue de 2,27 millones, lo que supone un descenso del 3% respecto a los que llegaron el mismo mes de 2019 (2,34 millones).
El archipiélago ha aglutinado en abril el 25,1% del total de visitas internacionales registradas en el conjunto del país y el mercado británico ha sido el que mejor se ha comportado este mes en Baleares.
El conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha valorado las cifras hechas públicas este jueves y ha destacado la importancia de que Balears registren el mayor gasto medio diario por turista en un mes de julio, así como que se haya logrado recuperar la práctica totalidad del turismo prepandemia. Unas cifras que ponen de manifiesto el incremento de ingresos de las empresas durante el ejercicio de su actividad, y la necesidad de incidir en lograr más calidad que cantidad, subraya Negueruela.
