La Mesa de Trabajo Empresarial Playa de Palma, que lidera la CAEB, mantuvo ayer una reunión de seguimiento para erradicar el turismo de excesos en la zona, que afecta especialmente a la primera línea de playa. Los empresarios y los representantes de las administraciones coinciden en que los cierres cautelares de los locales que incumplen las normas del decreto ley contra el turismo de borrachera es el camino «más directo y eficaz» para terminar con la imagen de desenfreno que tanto rechazo provoca y tan difícil resulta de eliminar en el destino mallorquín.

Los miembros de la mesa de trabajo se reunieron en la sede de la patronal mallorquina para abordar la problemática por el consumo excesivo de alcohol en la vía pública. Están representadas Abone (Asociación Balear de Ocio y Entretenimiento), Afedeco (Federación de Empresarios de Comercio en Balears), Restauración CAEB y la Asociación Hotelera de Playa de Palma. También participaron las administraciones con competencias turísticas, con el secretario general de la Delegación del Gobierno, Ramón Morey, el conseller insular Andreu Serra y el alcalde de Palma, José Hila.

Se acordó reforzar la colaboración público-privada, además de abogar por los cierres cautelares de los incumplidores de las normas. Los empresarios agradecen el trabajo de la Policía Local «con los recursos que tiene» y demandan más normativa contra problemáticas como la venta ambulante, falta de limpieza y seguridad que generan «siempre los mismos, muchos de forma reincidente», se critica.