Los niños y niñas saharauis que acoge Mallorca disfrutaron ayer de una fiesta de bienvenida junto a sus nuevas familias en el parque de sa Rectoria en Binissalem.

Los menores, procedentes de campamentos de refugiados en Tindouf, llegaron a las islas el pasado 21 de julio y pasarán el verano en casas de acogida a través del programa Vacances en Pau.

A la celebración acudieron varios miembros de la Associació d’Amics del Poble Saharauí, entre ellos la presidenta de la entidad, Catalina Rosselló, y la consellera de Asuntos Sociales, Fina Santiago, quien destacó que es la primera vez después de la pandemia que Mallorca acoge de nuevo a los menores saharauis.

Los organizadores agradecieron la solidaridad de las familias. | CAIB

«Sé que son momentos de alegría, pero también de mucho gasto y esfuerzo económico, por eso el Govern está eternamente agradecido a estas familias solidarias», manifestó la consellera durante la fiesta.

Hace cerca de treinta años que los menores de los campamentos de refugiados saharauis pasan los veranos en Mallorca gracias al programa de la asociación. Las familias celebraron ayer en Binissalem que la situación sanitaria permita que los niños regresen a la isla.

La directora general de Cooperación, Laura Celià, también asistió al evento, que concluyó con una cena junto a las familias de acogida y los menores con los representantes del Govern y la asociación.