Aina Calvo, delegada del Gobierno en Baleares, aseguró ayer durante la entrega de Medallas al Mérito de Protección Civil que el cuartel de Son Tous, que debería estar abierto y funcionando para finales de julio, aún no tiene fecha de apertura.

La instalación del equipamiento provisional está “prácticamente” listo, sin embargo, el retraso por parte de los proveedores en la entrega de la maquinaria de refrigeración ha provocado que el cuartel permanezca todavía cerrado hasta nuevo aviso.

El edificio, anteriormente destinado a la residencia de los soldados, pretende recibir a las personas migrantes que llegan a la isla. El emplazamiento está previsto para la llegada repentina de un gran número de migrantes durante un máximo de 72 horas, donde se les identificará. 

Durante este periodo de tiempo, serán retenidas personas que sean susceptibles de recibir atención humanitaria. Estas personas que necesiten esta ayuda médica, y de las cuales se hace cargo el estado, son mujeres, con y sin niños, las personas enfermas, identificadas con algún tipo de enfermedad y las personas que provienen de países con los que el Estado español no tiene acuerdo de devolución. El resto son puestas en libertad hasta que, en ciertos casos, se les devuelve a su país de origen si así lo determina el Poder Judicial. Si las fronteras de dicho país se encuentran cerradas, estos migrantes se convierten en ciudadanos libres con un expediente de devolución pendiente.

Así están quedando las instalaciones de Son Tous para la custodia temporal de los migrantes irregulares

Así están quedando las instalaciones de Son Tous para la custodia temporal de los migrantes irregulares B. Ramon

Por otra parte, la delegada también confirmó que la cifra actual de personas migrantes irregulares que han llegado a la costa de Baleares es de más de 700 personas, en las que se incluyen la repentina llegada de las 102 personas en seis pateras distintas durante la noche del 25 y la madrugada del 26 de julio. “Estamos en la misma tendencia que los dos últimos años” aseguró Calvo, sin embargo, también ha destacado lo “ocupados” que se encuentran los miembros a cargo de la correcta gestión de estas personas.

Además, declaró como África “sufrirá de manera todavía más dura” una hambruna derivada de la crisis del cereal, situación de la cual se es “consciente” en el Govern y por la que se puede provocar una “mayor presión migratoria a todos los efectos”.

La llegada actual del centenar de migrantes es una situación «controlada» que es coordinada por la Policía Nacional junto a la atención humanitaria que provee Cruz Roja, a la que se le puede añadir la cooperación de la Guardia Civil, Salvamiento Marítimo y de instituciones locales.