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La Audiencia deniega todas las peticiones de las defensas y rechaza anular el caso Cursach

El tribunal desestima las alegaciones de los acusados y ordena la continuación del juicio

La sala avala la instrucción y descarta por ahora que se vulnerasen derechos fundamentales

Bartolomé Cursach y su pareja, ayer a su llegada a la Audiencia Provincial para conocer la resolución del tribunal. | B. RAMON

Habrá juicio del caso Cursach. La Audiencia Provincial ha rechazado todas las peticiones de las defensas para anular el proceso judicial e impedir que se celebrará la vista oral. En un auto de 215 páginas notificado ayer, las magistradas de la sección primera avalan la instrucción de la causa y no aprecian por ahora ninguna de las vulneraciones de derechos planteadas por los acusados. Por un lado, consideran imprescindible la celebración del juicio para esclarecer los hechos; por otro señalan que no les corresponde «enjuiciar las acciones» del exjuez Manuel Penalva, el exfiscal Miguel Ángel Subirán y los policías investigados por cometer presuntas irregularidades en sus pesquisas. Con esta decisión, el juicio se reanudará el lunes con los interrogatorios de los imputados. Bartolomé Cursach será el primero en declarar.

El auto desmiente las irregularidades procesales denunciadas por las defensas en su intento de anular la causa. El tribunal rechaza por completo que se ocultaran diligencias durante la investigación, argumento que «no se sostiene». También descarta la tesis de que los acusados no declararon durante la instrucción por los hechos que se enjuician y concluye que todos fueron debidamente informados de las acusaciones que pesan sobre ellos. «No puede alegar que no sabe de qué se le acusa», replica al letrado de Cursach.

La sala rechaza también que se les privara del derecho a declarar ante un juez imparcial. Las magistradas recuerdan que cuando Penalva fue recusado y apartado del caso, no pidieron declarar ante los magistrados que les sustituyeron. Y señalan también que no fue Penalva quien cerró la instrucción, sino los magistrados Miguel Florit, primero, y Enrique Morell, después. También se muestran tajantes sobre los delitos que se atribuyen a Penalva, Subirán y los policías en la causa abierta en el TSJB: «No corresponde a este tribunal enjuiciar estas acciones». En este sentido, señala que las supuestas presiones y coacciones a testigos deben ser aclaradas por estos en sus comparecencias en el juicio. «No contamos en este momento con concretos elementos que acrediten, con la contundencia necesaria para un pronunciamiento de nulidad (o absolución) que nos permitan declarar viciada de imparcialidad una concreta diligencia sumarial», resume el auto.

Las magistradas rechazan también declarar prescritos varios de los delitos imputados a policías locales, como reclamaban sus abogados, y aseguran que la controversia sobre las fechas en que se habrían cometido debe ser resuelta también en la vista oral.

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