El Govern presentó ayer el borrador del Plan de Transición Energética y Cambio Climático, que establecerá un marco transversal de orientación y planificación de los objetivos, las políticas y las acciones para cumplir con la Ley de transición energética y cambio climático, con el objetivo de reducir un 40 por ciento las emisiones contaminantes en Balears antes de 2030.

El objetivo de este Plan de Transición Energética y Cambio Climático es que para el año 2023 las Islas tengan las bases para un modelo económico «sostenible, descarbonizado y resiliente al cambio climático» que permitirá un crecimiento «socialmente justo, inteligente y democrático».

Según este Plan, el primer objetivo es reducir las emisiones un 40 % para el año 2030, para llegar a la neutralidad climática en 2050. Asimismo, la reducción del consumo primario debería bajar un 26 % para el año 2030 y hasta un 40 % en 2050. Por otro lado, el Plan prevé cuotas quinquenales de penetración de energías renovables con el fin de lograr progresivamente los objetivos siguientes, definidos como proporción de la energía final consumida en el territorio balear: el 35 % para el año 2030 y el 100 % para el año 2050. Estos objetivos se ajustarían a las particularidades de cada isla.

«2030 es pasado mañana. Tenemos que hacer un esfuerzo y garantizar el futuro de las islas», insiste Yllanes, quien también recuerdaa que el Govern tiene el compromiso de cumplir con los objetivos fijados para reducir el consumo energético, fomentar el uso de energías renovables y apostar por la economía circular, entre otros aspectos.

No obstante, argumenta que su intención principal es «blindar energéticamente» el archipiélago, con el fin de que las islas sean autosuficientes en cuanto a la producción de energía limpia, así como para dar cumplimiento a los acuerdos internacionales. Por ello, reclama a todos los grupos del Parlament que se sumen a la iniciativa.