Més per Mallorca sospecha que, con motivo de las obras de ampliación del aeropuerto de Son Sant Joan, la empresa proveedora de servicios de navegación aérea, Enaire, quiere eliminar la Región de Control Balear y trasladar a sus 340 trabajadores a la Región Este, ubicada en Barcelona. El diputado autonómico de Més Josep Ferrà y el senador autonómico Vicenç Vidal denuncian que estas obras de ampliación «ponen en peligro la seguridad aérea».

Ferrà y Vidal indican que estas obras provocarán un «encajonamiento total» de la torre de control y explican que los trabajadores les han trasmitido sus dudas sobre la «continuidad de este centro de control en Balears».

Ferrà informa de las consecuencias de unas obras que considera «innecesarias» y que generan «problemas al mismo aeropuerto», ya que a su juicio, con el «encajonamiento de la torre», Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) «no ha tenido consideración de su empresa hermana, Enaire, que se encarga de la seguridad de los vuelos que llegan a las islas».

«Estas obras provocarán muchas molestias y problemas de seguridad, como la reducción de los terrenos donde está ubicado el centro de control con su aislamiento, el incremento del tiempo de atención y respuesta ante incidencias en la torre de control, se complica el acceso a todos los suministros y se dificulta el acceso en caso de emergencia, como pueda ser una evacuación», señala.

El PP de Balears también exige garantías sobre la continuidad del Centro de Control de Navegación Aérea ante la «falta de compromiso» del Govern en su respuesta a la batería de preguntas formuladas sobre el tema en el Congreso. Argumentan que, si bien ENAIRE asegura que no figura entre sus planes el traslado del centro de control de Palma en Barcelona y defiende la inversión en los últimos ejercicios, los populares «echamos de menos un compromiso a largo plazo dada la importancia de esta instalación para Balears».

Asimismo, recuerdan que el pasado mes de marzo presentaron una batería de preguntas ante las informaciones sobre la posibilidad del traslado del centro de control de navegación aérea situado en el Aeropuerto de Palma a Barcelona porque consideran «estratégica» la conservación de esta instalación en Balears tanto por la importancia de la conectividad con el archipiélago como por la gestión de los vuelos interislas, así como por la importancia de mantener los actuales puestos de trabajo.