Según el coordinador de Salut Mental de Balears, Oriol Lafau, la figura del psicólogo clínico en los centros de salud ayudaría mucho «a no medicar tanto a la población». «Los médicos de Atención Primaria ven muchos pacientes, tienen pocos minutos para dedicarles y es normal que en ocasiones mediquen más de la cuenta porque no pueden por falta de tiempo aplicar otros tratamientos terapéuticos», opina Lafau. Con el psicólogo clínico, con capacidad para intervenir con otro tipo de terapias, «veríamos una bajada en esa medicación».
«En Balears, en 2021, 30.000 personas más han recibido tratamiento con ansiolíticos comparado con 2020. En cuanto a tratamientos antidepresivos, han sido 17.000 más», apunta alarmado.
El pasado mes de marzo, en un encuentro que tuvo lugar en Son Espases, Lafau dio un dato que puso de relieve la importancia de la Atención Primaria en el contexto de la salud mental en estos tiempos de pandemia. «En estos momentos, uno de cada dos pacientes que van al médico de Atención Primaria lo hacen por un problema de salud mental», destacó el coordinador autonómico.
El experto lanzó la siguiente reflexión también: «La salud mental ha sido una disciplina a la que siempre se había mirado por encima del hombro. Por ejemplo, no hemos mirado de cara al suicidio. Muchas veces hemos tenido que remar con el viento en contra, pero desde 2015, cuando asumí la coordinación de Salut Mental, comprobé que este ámbito sería una prioridad para la conselleria de Salud. Por fin se nos está mirando como se nos debería haber mirado desde hace muchos años», señaló. «No estamos como en Cardiología, pero sí estamos ya en primera línea», agregó.
Los trastornos mentales en los que más ha incidido la pandemia son los de tipo adaptativo, depresivos y de ansiedad. En Atención Primaria están entrando muchísimos casos de este tipo que son leves, «depresiones y ansiedad que son secundarias a procesos o factores adversos de la vida y de los que podría encargarse perfectamente el psicólogo clínico del centro de salud», concluye.
