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Alejandro Tiana: «Si repetir curso fuera una solución, España estaría entre los mejores»

El ‘número dos’ del Ministerio de Educación, Alejandro Tiana, aprovecha su visita a Mallorca para desgranar la propuesta de los nuevos currículos de la Lomloe y dar respuesta a las cuestiones más polémicas de la legislación entrante

Alejandro Tiana: "Los currículos de la Lomloe profundizan en algo que ya empezamos hace años"

Alejandro Tiana: "Los currículos de la Lomloe profundizan en algo que ya empezamos hace años" G. Bosch

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Alejandro Tiana: "Los currículos de la Lomloe profundizan en algo que ya empezamos hace años" Irene R. Aguado

Alejandro Tiana (Madrid, 1951), secretario de Estado de Educación, es uno de los arquitectos de la Lomloe, y también lo fue hace 15 años de la LOE. En su amplia trayectoria ha abogado por un sistema más sensible a las necesidades de los jóvenes, una perspectiva que se culmina en una reforma educativa con impacto directo e inmediato en las aulas.

¿Los currículos de la Lomloe suponen una nueva manera de entender la pedagogía en España?

En realidad, profundizan en algo que ya empezamos hace años. La primera vez que se empezó a hablar de competencias en España fue en la LOE, hace 15 años. Y la Lomce volvió a hablar de ello. Sin embargo, ninguna de las dos leyes llegó a desarrollarse por completo. Quizá porque los tiempos no estaban maduros o porque no sabíamos tanto. Ahora, lo que hacemos es llevarlo a la práctica. No diría que es novedoso, hay muchos centros que ya trabajan así. Solo le damos un carácter general.

¿Por qué priorizar el aprendizaje de competencias ante la memorización de conceptos?

El aprendizaje por competencias no se fija solo en la adquisición de conocimientos, sino también en la movilización de los mismos. Uno aprende cosas para poder aplicarlo en su vida y seguir estudiando. El aprendizaje superficial (que incluye el memorístico) dificulta llegar a entender realmente aquello que se trabaja.

¿Cómo mejora el sistema educativo eliminar las cifras en las notas?

Manejarse excesivamente por valoraciones numéricas distorsiona el modo de valorar el aprendizaje. El sistema cualitativo es una escala diferente de desarrollo de las competencias. Las notas numéricas muchas veces inducen a equívocos. Cuando al profesor le obligas a valorar de forma cualitativa, resulta más útil incluso para el estudiante.

Se regresa a un modelo que ya se descartó hace años.

Si se eliminó no fue porque fuera un mal sistema. De hecho, es más adecuado para los que están en una etapa inicial de la formación. La clave no está en si pasa o no de curso, sino en cómo llegar al mejor dominio posible de aquello que está trabajando. Este modelo ya funcionó bien en su tiempo.

«Si repetir curso fuera una solución, España estaría entre los mejores»

Hay una intención muy clara de potenciar la FP, incluso con una Ley Orgánica propia.

Sí, la Ley de FP incide en una parte de la Lomloe. Se hizo así a raíz de un análisis de la situación en España. Muchos jóvenes llegan a la educación superior, más del 40%. Sin embargo, en la secundaria postobligatoria tenemos un porcentaje menor que otros países. Hay una clara falta de personal cualificado en esos niveles, por eso hace falta promover la FP. Además, el abandono escolar disminuye a medida que se fomenta.

España es el país con mayor tasa de repetidores de Europa. ¿Los nuevos currículos se han hecho con la intención de paliar esta lacra?

Toda la ordenación de la etapa pretende que la repetición sea un fenómeno extraordinario. Repetir de curso no es la solución. Es más bien la prevención y la recuperación lo que ayuda al alumno. Francia y Portugal, dos países vecinos, estaban como nosotros hace 10 años y han conseguido mejores resultados con menos repetidores.

Hay críticas a la promoción automática por lastrar la motivación de los alumnos.

Existe esa idea, pero no es cierta. Hay muchos países que siguen ese modelo y tienen muy buenos resultados. Además, nosotros, en realidad, no implantamos un sistema de promoción automática. Lo que decimos es que la promoción no debe quedar reducida a un cómputo de materias. Pasarán de curso cuando el equipo docente crea que tiene que pasar. Esto también tiene un efecto positivo sobre el profesorado, que en lugar de limitarse a cantar notas en las sesiones de evaluación, tendrán que reflexionar sobre lo que el alumno necesita. Estudios internacionales como el TALIS de la OCDE concluyen que el profesorado español es el que trabaja de manera más individual. Eso hay que mejorarlo.

Aun así, hay voces que critican la Lomloe por ser «muy laxa» con los estudiantes.

No entiendo por qué se dice eso. Nosotros buscamos lo que sea más adecuado para el alumno, y sobre todo en la educación obligatoria. Al final, el deber del sistema educativo es que todos los estudiantes lleguen hasta el final. En las etapas postobligatorias todavía puede haber elementos de selección. Cuando se habla de promoción automática parece que lo que está detrás es una crítica. Pero la repetición no es un sistema que solucione los problemas. Si fuera así, España bebería en los mejores resultados del mundo.

¿Por qué la Ley no apuesta por estabilizar la asignatura de Filosofía?

Será una asignatura optativa, y estoy seguro de que al final se acabará impartiendo en el mismo número de comunidades autónomas que antes. Y será obligatoria en Bachillerato. Yo creo que la Filosofía está bien tratada en los currículos, otra cosa es que haya quien aspire a más. Hay que recordar que la asignatura de Valores Cívicos tiene muchos contenidos de filosofía.

¿Por qué es importante la autonomía curricular?

Hace que el centro se sienta más responsable del avance de su alumnado, y que tenga que pensar cómo emplea del mejor modo el tiempo que se les ofrece. Hay áreas que tampoco merecen una asignatura, pero sí se pueden tocar de forma transversal, como la educación vial o el ciberacoso. Las escuelas necesitan tener más espacio para desarrollar su propio proyecto en función del contexto de sus alumnos.

Cada gobierno aprueba su ley educativa. Eso también repercute en la enseñanza. ¿Le preocupa la estabilidad de la Lomloe?

Yo creo que es natural que en las leyes, pasado un tiempo, se revisen cuestiones. De hecho, la propia Lomloe prevé un instituto de desarrollo curricular para hacer un seguimiento de la evolución. Lo importante es que ahora hay mucho profesorado que está de acuerdo porque le facilita trabajar de una manera más acorde a su alumnado, y espero que eso actúe como factor de continuidad.

Precisamente algunos sindicatos han asegurado que la Lomloe aumenta en exceso la carga docente y la burocracia.

La Ley no pone más burocracia. Eso es una cuestión de cada centro. Yo soy partidario de aligerar la carga burocrática innecesaria. Entiendo el temor del profesorado, pero todas las profesiones evolucionan. Los docentes están acostumbrados a adaptarse, y tampoco se les pide algo radicalmente distinto. No creo que tengan más carga de trabajo.

Los sindicatos también han pedido aplazar la aplicación de los currículos. ¿Están abiertos a una prórroga?

Eso no depende del Ministerio. Está incluido en una Ley aprobada en el Congreso de los Diputados. Para cambiar los plazos habría que hacer otra Ley. Si en este momento empezamos a tramitar otra normativa, habría mucha incertidumbre. De todas formas, hay unos elementos de ordenación que tienen que entrar en vigor inmediatamente, pero la organización de las escuelas irá cambiando paulatinamente.

Uno de los puntos conflictivos en la Ley de Educación balear, como en la Lomloe, es la cuestión lingüística.

Creo que el debate no está tanto en la comunidad educativa. Viene de fuera de los centros. Pero al final, el punto crítico es cómo conseguir que los alumnos tengan un buen dominio de todas las lenguas, no solo las cooficiales, también las extranjeras. Lo que hay que valorar es que eso se consiga. Porque en el idioma no valen las reglas rígidas, los centros tienen que tener cierto margen de flexibilidad.

En la UIB hace semanas que se apagó la calefacción para ahorrar en la factura eléctrica, aunque muchos alumnos se han quejado. ¿Le parece una buena medida?

No lo sé. Lo que te puedo decir es que como rector de la UNED me tocó ajustar los presupuestos y a veces hay que tomar decisiones incómodas, pero eran las únicas que se podían tomar. Pero desconozco las bases presupuestarias de la UIB, y no sé qué alternativas tiene. No puedo hablar alegremente sobre ello.

En la UIB ha habido un conflicto por la presentación de un libro supuestamente tránsfobo. ¿Cree que cancelar el acto era lo correcto?

La universidad debe ser un lugar de debate y de libertad académica. Es cierto que a veces se llega a un punto que no tiene lugar a debate académico. Pero me cuesta más entender que una universidad cierre el debate, que lo contrario. Llegar a los extremos a los que se está llegando en las facultades norteamericanas no es bueno. Pero en este caso concreto no me atrevo a hablar, lo desconozco.

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