Todo preparado en el polideportivo de Nuremberg en el que se reunirán los voluntarios mallorquines y el centenar de ucranianos que han ido recogiendo en las últimas horas por diversas ciudades y puntos de refugiados de Polonia y Hungría. En la instalación se han dispuesto esteras para quien desee descansar antes de emprender el viaje de vuelta a Mallorca, así como todo tipo de alimentos y productos de higiene.

El convoy mallorquín, formado por un autocar y cuatro furgonetas, salió el viernes desde el Port d'Alcúdia con destino a la frontera con Ucrania con material humanitario y durante el trayecto ha ido recogiendo a ucranianos, en su mayoría mujeres y niños, que han huido de la guerra en su país. 

Los refugiados y la veintena de mallorquines, buena parte de ellos voluntarios de Manacor, bomberos y un representante de la ONG Per Ells, regresarán juntos desde Nuremberg a la isla, donde tienen previsto llegar entre el miércoles y el jueves. 

Es el contingente más numeroso de ucranianos que recalará en la isla desde que empezó la guerra y la mayoría de ellos se quedarán con familias de acogida contactadas por Per Ells, asociación que lleva diecisiete años gestionando la acogida en Mallorca de niños de la zona de Chernóbil.