La flota pesquera balear se ha sumado al paro convocado a nivel nacional y permanecerá amarrada a partir de mañana durante tres días, hasta el miércoles día 23 de este mes de marzo.

Según informó ayer la Federación Balear de Cofradías de Pescadores en una nota de prensa, la flota pesquera balear secundará la protesta mañana lunes 21, el martes 22 y el miércoles 23, después de que la organización se haya sumado al paro convocado a nivel nacional. 

Esta situación coincide con el desabastecimiento de pescado fresco venido de la península que ya está sufriendo el archipiélago por las protestas de los transportistas allí y la acción de piquetes que han estado dificultando la llegada de mercancías a los puertos y provocando que el género se echara a perder, por lo que los pescadores se venían obligados a no salir a faenar en puertos del Cantábrico o Andalucía. 

Ayer se dejaba notar en los expositores de pescadería del Mercat de l’Olivar, en Palma, con escasa oferta de pescado fresco y marisco peninsular y también de pescado fresco local. El temporal marítimo impidió a la flota pesquera de Mallorca salir a faenar.

El próximo miércoles, los pescadores mantendrán una reunión con el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas. Se esperan «soluciones urgentes» para solventar la «gravísima» situación del sector.

El presidente de la Federació Balear de Cofradías de Pescadores, Domingo Bonnín, explicó que la decisión de amarrar la flota pesquera se ha tomado tras la reunión que mantuvieron el viernes por la noche las cofradías a nivel estatal, convocadas por la Federación nacional.

En esta línea, Bonnín dice «no entender que hasta la fecha el Estado español no se haya puesto manos a la obra en ayuda del sector, cuando gobiernos de otros países de la cuenca mediterránea, como es el caso de Francia e Italia, han adoptado ya soluciones de urgencia para apoyar de inmediato a sus respectivos sectores pesqueros».