«Estamos repitiendo errores de las primeras semanas de la pandemia porque las colas en las gasolineras o la pretensión de acaparar alimentos resultan absurdas», lamenta el presidente de la patronal de comercio Afedeco, Antoni Gayá, al tiempo que destaca que en las islas no existe ningún problema de desabastecimiento, una tesis compartida por el secretario general de la asociación balear de estaciones de servicio, Jesús Salas, y por el delegado en las islas de la asociación de grandes empresas de distribución (ANGED), Antonio Canals, al igual que por representantes de las cadenas de supermercados, desde las que se recuerda que el único producto que se está viendo afectado por restricciones en las ventas es el aceite de girasol por una decisión adoptada a nivel estatal. En cualquier caso, no se oculta que el problema en la escalada de precios de los carburantes está siendo muy notable, y que también los alimentos van a sufrir un encarecimiento paulatino durante las próximas semanas.
Según estas empresas, la psicosis que se ha desatado no tiene un carácter generalizado, y en el caso de las gasolineras se centra en las de menor coste, dado que en general las ventas en el sector se han reducido un 15% debido al número creciente de ciudadanos que optan por los desplazamientos en transporte público, a pie, o compartiendo automóvil. Sin embargo, Jesús Salas reconoce que la escalada de precios en los carburantes resulta exagerada y asegura que está perjudicando incluso a las propias estaciones de servicio.
También desde los supermercados se señala que aunque se está detectando un crecimiento en la adquisición de productos de primera necesidad (como arroz, pasta, enlatados, aceite o lácteos), éste se debe a comportamientos aislados por parte de algunos consumidores que pretenden hacer acopio. En el caso de Mercadona, se señaló que el aumento de la demanda registrado el pasado jueves, provocado por un mensaje en whatsapp de una persona promoviendo el paro de transportistas convocado para el día 14, también ha tenido un carácter puntual y que todos los productos se han ido reponiendo sin mayores dificultades.
En este sentido, se aseguró que las empresas del sector no prevén ningún problema de suministros a partir del lunes pese a la convocatoria de un paro indefinido por parte de una plataforma de transportistas, dado que ninguna de las grandes patronales vinculadas a este colectivo ha respaldado esta protesta. Esta postura evitando dar apoyo a dicha paralización fue valorada por el conseller de Movilidad, Josep Marí.
Toni Gayá lamentó el riesgo que se genera desde las redes sociales, ya que «alguien que no sabe de lo que habla lanza un mensaje que se reproduce y se termina convirtiendo en una opinión cualificada, cuando no lo es en absoluto», en relación al corte de voz que circuló en el que se anunciaba un bloqueo de Palma y de alguna empresa de supermercados. Esta misma advertencia fue lanzada por la patronal de transportistas de las islas.
En cualquier caso, el presidente de la patronal PIMEM, Jordi Mora, solicitó ayer a todas las Administraciones que se impliquen para paliar la escalada que se está produciendo en los precios energéticos, y reclamó medidas urgentes como una reducción temporal en el IVA que se les aplica, ante el riesgo de que la inflación alcance el 10% en verano, según sus estimaciones.
La junta directiva de la asociación de transportistas de mercancías de Balears se reunió ayer para abordar el problema del encarecimiento de los carburantes, y aunque se anunció posteriormente que se van a ver obligados a elevar sus precios para compensar esta subida de sus costes, se reiteró que bajo ningún concepto van a respaldar el paro convocado por una plataforma estatal a partir del lunes, e incluso se señaló que este tipo de protestas no son ahora adecuadas.
Una de las empresas más importantes en el transporte de alimentos que opera en Balears, Mascaró Morera, subrayó que no tiene la menor intención de paralizar su actividad, según puso de relieve su responsable en Mallorca, Joan Pons, el cual defendió que el problema del encarecimiento del carburante no debe de combatirse provocando un desabastecimiento.
También CC OO reiteró ayer que no hay ninguna huelga convocada y que los trabajadores del sector deben de acudir a sus puestos.
